Juveniles se actualizan en estudios tras las prácticas

Bryan Bennet (centro)da indicaciones en el colegio John Osteen. Se graduó en la institución. Foto: Misael Morales para El Comercio

Bryan Bennet (centro)da indicaciones en el colegio John Osteen. Se graduó en la institución. Foto: Misael Morales para El Comercio

Bryan Bennet (centro)da indicaciones en el colegio John Osteen. Se graduó en la institución. Foto: Misael Morales para El Comercio

Boris Paredes acude a las aulas del colegio Jhon Osteen por las mañanas. Va a los entrenamientos de la Sub 16 del Aucas, por las tardes. Cuando cae la noche se dirige a una Casa Hogar para pernoctar.

El esmeraldeño, mediocampista de ojos claros de 16 años, no tiene ayuda de sus familiares y vive solo en Quito. Por un convenio entre la institución educativa, el equipo oriental y la Fundación Deporte Estudio, empezó a tomar clases desde mayo del 2018 en el colegio John Osteen para cubrir su déficit de instrucción en la primaria y la secundaria.

Los profesores determinaron que solo tenía estudios hasta quinto de básica. A su edad, debía cursar el primero de bachillerato. El déficit de estudios es uno de los problemas con los que adolescentes que anhelan en convertirse en futbolistas profesionales llegan a planteles de Quito.

Los equipos de Primera de la capital les proveen educación desde que pasan a formar parte de sus residencias.

Sin embargo, en otros casos, algunos optan por la modalidad de estudios denominada adaptación curricular, que les permite dar pruebas de actualización para nivelarse. En el John Osteen, Paredes y otros 19 chicos toman esta modalidad a la par de sus entrenamientos.

Paredes dio una prueba para actualizarse hasta primero de bachillerato, pero falló. Hizo otro intento y logró nivelarse hasta décimo de básica. “Me concentré. Me dijeron que sería difícil pero al final lo conseguí”, dice con timidez el mediocampista que llegó desde Esmeraldas.

Tania Amores, coordinadora académica de la Fundación Deporte Estudio y quien labora en el centro educativo, explica que los juveniles llegan y muestran más dificultades en las materias de matemáticas, lengua y literatura e inglés. Realizan ejercicios específicos y muestran sus progresos hasta nivelarse.

Con esta modalidad de estudios, se graduaron cinco juveniles, desde el 2015. Entre ellos estuvieron Ronald Briones, quien juega en el Norteamérica e irá al Alavés de España; Fredy Lozada, de la Reserva de la Católica; y Andrés Nazareno (quien integra el plantel de Primera de Católica).

También obtuvo el bachillerato Bryan Bennet, quien hasta el año pasado formó parte del Alianza Cotopaxi (ahora Independiente Juniors).

El club no le renovó contrato y él se unió al Jhon Osteen para ayudar en las tareas deportivas. “Vine para ayudar y retribuir en todo lo que me apoyaron”, expresa el esmeraldeño de 19 años.

Aunque no sabe si volverá a jugar en un plantel profesional, su meta ahora es formarse como entrenador.

Para ello, empezará estudios de entrenamiento deportivo desde el 26 de abril, en un centro de estudios de la capital. “Si se da la opción de volver a jugar al fútbol sería muy bueno, pero ahora me ilusiono con enseñar”.

José Cifuentes, el capitán de la Selección que ganó el Sudamericano Sub 20 de Chile, también espera graduarse en cuatro meses. Él siempre llega ‘sobre la hora’ a las clases puesto que, por las mañanas, se entrena en el América de Quito. Le faltan cuatro meses para obtener el título. Cuando llegó a la institución educativa le faltaban tres años de escolaridad.

Cristian Reinoso, quien es asesor del mediocampista, reconoce que a los jóvenes les costó adaptarse al inicio a la cotidianidad de los estudios en un centro formativo. “Al inicio llegaban a estudiar con chicos a los que superaban bastante en estatura y edad, pero se igualaron y ahora se sienten parte del grupo”.

Cifuentes recibió un homenaje el lunes pasado por ganar el título de la Tri. Ahora, su meta es ir al Mundial de Polonia. Pero también graduarse.

Paredes tiene la misma meta: “Cuando no estudiaba no sabía casi nada. Ahora, lo que quiero es graduarme. Si logro llegar a Primera también sería bueno”.

Suplementos digitales