Juan José Padilla y Juan Bautista salieron a hombros

El francés Juan Bautista recibió de rodillas con la muleta al toro Apasionado.

El francés Juan Bautista recibió de rodillas con la muleta al toro Apasionado.

Juan José ­Padilla (izq.) y Juan Bautista en la Feria de Ambato 2018. Fotos: Glenda Giacometti / EL COMERCIO

Con dos toreros por la puerta grande el broche de la Feria de Ambato 2018 fue triunfal. Juan José Padilla, vuelta con petición y dos orejas. Juan Bautista, silencio y dos orejas y Álvaro Samper, silencio y oreja.

Con casi media plaza en tarde calurosa se lidiaron tres toros de Mirafuente y tres de Vistahermosa, de variada presencia y juego, destacando los corridos en cuarto y quinto lugar.

Juan José Padilla saludó con tres largas cambiadas, verónicas y chicuelina al primero que remató en los medios. Quite de chicuelinas al paso, puyazo excesivo y un brillante tercio de banderillas muy aplaudido. El toro, noble y de son, se estrelló contra un burladero, se estropeó un pitón y quedó algo descoordinado.

Padilla le hizo una faena entonada y encomiable en especial por derechazos y algunos naturales meritorios con adornos, marca de la casa, abundantes pases en circular y desplante final. Estocada entera y caída, petición fuerte y pitos al palco por denegar la oreja. Vuelta al ruedo entre ovaciones.El cuarto era el último toro del torero jerezano en esta plaza de Ambato en la temporada de su despedida de los ruedos. Buenas fueron las verónicas de recibo y quite vistoso para llevar al buen ejemplar al caballo.

Nuevo tercio lucido y preciso con las banderillas, que gustó mucho al público. ‘El Pirata’ inició de rodillas en tablas su trasteo de muleta poniendo emoción en los tendidos. Los aficionados le acompañaron toda la tarde correspondiendo a la entrega del diestro. Una faena de mayor temple por el buen pitón derecho, donde alcanzó algunas series de vibración y ensayos en el toreo al natural.

El francés Juan Bautista recibió de rodillas con la muleta al toro Apasionado.

Luego de los nutridos circulares y adornos, estocada que hizo guardia y otra de gran ejecución. Dos orejas y vuelta triunfal con ovaciones generales agitando su enseña, la bandera pirata en su cálida despedida. Juan Bautista saludó por verónicas y se lució en un quite frente por detrás para dejar al toro en la cabalgadura. Otro quite por chicuelinas de su sello personal y el toro se paró pronto. Mató de un pinchazo y estocada caída. Silencio. En el quinto de la tarde de bonita lámina y buen juego, el torero francés lo recibió con una larga cambiada y suaves verónicas. Fue hermoso el galleo por chicuelinas para llevar el toro ante el montado. De rodillas se fue Juan Bautista Jalabert con la muleta.

Tras un emotivo inicio construyó una faena de clase, temple y técnica superior donde afloró la madurez, la excelsa condición que posee para interpretar el toreo. El pitón del toro era, definitivamente, el derecho y por allí llegaron los pasajes más sobresalientes en medio del reconocimiento de la afición.

La estocada contraria, atracándose de toro, fue el colofón de una grane faena y el presidente de Plaza entregó sin dudar dos orejas de inmediato, paseadas por el redondel en medio del reconocimiento del público que se dio cita en la Plaza Monumental.

Álvaro Samper, torero ecuatoriano que cortó una oreja.

Álvaro Samper saludó con buenas verónicas al segundo de la tarde y se fue animoso a quitar por chicuelinas. Con la muleta no se mostró confiado y no se acopló pese a que la res pudo haber tenido prestaciones. Estocada delantera y entera. Silencio.El segundo del lote del torero quiteño tuvo un buen pitón derecho aunque no transmitía. Samper estuvo más entonado y consiguió algunos muletazos de mérito en faena variada el toreo con la mano derecha y luego al natural. Se adornó por manoletinas. Mató de pinchazo hondo y caído. Oreja.

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