Parecía que el Club Deportivo El Nacional consolidaba su victoria. Ganaba por 1 – 0 y en el minuto 61 fue expulsado Vinicio Durazno, defensa central del Independiente del Valle, por una falta contra Fabricio Guevara, quien ingresó en el segundo tiempo.
En ese momento del partido el equipo de Sangolquí parecía no tener los argumentos para conseguir la igualdad. No obstante, cinco minutos después, en el minuto 66, Richard Mercado aprovechó un rebote que concedió el golero Roris Aragón. Esto, tras un remate desde el costado derecho de José Guerrero, y consiguió el empate con un disparo de derecha.
La alegría de Mercado fue tal que no le importó la tarjeta amarilla que le sacaron por quitarse la camiseta por celebrar el tanto con la hinchada del valle que se ubicó en la general noroccidental.
Mientras esto ocurría, en la tribuna del Olímpico Atahualpa, el técnico Jorge Luis Pinto vivía un partido aparte. “Vamos, vamos, con confianza”, decía, casi a los gritos, a su asistente en el campo, el profesor Fernando Baldeón, a través de un intercomunicador.
Pinto fue expulsado en el partido frente al Macará, en la quinta fecha del campeonato y ayer cumplió el segundo y último partido de suspensión.
Pinto daba indicaciones claras a su asistente. La consigna en ese momento era que sus jugadores no cayeran en la desesperación por conseguir la victoria.
Pero los minutos fueron pasando y los jugadores criollos, aunque tenían la mayor parte del tiempo el balón, no podían crear jugadas de peligro para vulnerar al portero Librado Ascona.
Luego, cuando faltaban 15 minutos para que finalizara el cotejo, las indicaciones de Pinto eran que se jugara por los costados. “Abran la cancha. Abran la cancha”, decía con desesperación.
En las gradas, Pinto no dejaba de dar indicaciones. Y en la cancha, Michael Jackson Quiñónez empezó a generar jugadas de profundidad por el costado izquierdo. Por eso Pinto decía a Baldeón que otro jugador hiciera lo mismo por el costado derecho.
Los minutos transcurrían. “Fernando, Fernando (Baldeón), que aprieten al arquero y apuren al árbitro”, decía el colombiano.
Con estas indicaciones quería que no se perdiera tiempo. Pero los minutos pasaron y El Nacional no pudo vencer la resistencia de Independiente.
Los dirigidos por Janio Pinto, después de la expulsión de Durazno, empezaron a defenderse con cinco jugadores en el fondo y buscaron jugar de contragolpe.
En el minuto 84, el criollo Guevara también fue expulsado.
Cuando el cotejo terminó, algunos hincas criollos mostraron su respaldo al técnico colombiano. No obstante, otros aficionados le gritaron que renunciara mientras dejaba la tribuna.