El encuentro entre Guillermo Romero (1 izq.) y Rodrigo Paz (c) se dio la mañana de este domingo 26 de noviembre del 2017, en el acto de inauguración de los ascensores en el estadio Rodrigo Paz. Foto: Fabián Alarcón/EL COMERCIO
Guillermo Romero, presidente de Liga de Quito, y Rodrigo Paz, presidente vitalicio del cuadro azucena, debieron estrechar sus manos a pesar de sus diferencias en el club capitalino.
El encuentro se dio la mañana de este domingo 26 de noviembre del 2017, en el acto de inauguración de los ascensores en el estadio Rodrigo Paz. Ambos dirigentes se enfrascaron en una disputa verbal a través de los medios por el manejo del plantel universitario, que marcha octavo en la tabla de posiciones acumulada.
Romero había manifestado su inconformidad por el rendimiento del equipo este año. “La comisión de fútbol ha hecho cosas muy importantes, por ello todas las Copas que tiene Liga, pero en el fútbol se puede pasar de héroes a villanos“, expresó en una entrevista radial.
Paz, de su lado, cuestionó las palabras de Romero y aseguró que él y su familia estaban dispuestos a dejar la Comisión de Fútbol “para que otros se encarguen. Ya estoy cansado y mi hijo debería ocuparse ya de otras cosas”, manifestó en otro medio radial.
A pesar de estas diferencias, Paz y Romero debieron juntarse en la inauguración de los ascensores y subieron juntos por el lado occidental del estadio.