Darwin ‘Guadaña’ Miranda descendió en bicicleta desde la cumbre del Cotopaxi

El descenso total de Darwin Miranda, desde la cima del Cotopaxi, tuvo una duración de 27 minutos. Foto: archivo particular

Darwin ‘Guadaña’ Miranda es un deportista latacungueño de cepa, que lleva en su ADN la adrenalina por experimentar nuevas sensaciones. Este sentido de aventura lo motivó a descender en bicicleta desde la cima del volcán Cotopaxi en la modalidad de 'Downhill'. 

Para poder circular por la nieve colocó crampones en las llantas de su bicicleta. Bajar desde los 5 897 metros de altura sobre el nivel del mar de la cumbre, hasta 3 800 metros de altura en la laguna de Limpiopungo en el Parque Nacional Cotopaxi, le tomó 27 minutos y un segundo (27:01 minutos). Ocurrió el 9 de enero del 2019, aunque la idea nació hace casi 20 años junto con su abuelo, ahora convertido en uno de sus "ángeles protectores".

‘Guadaña’, de padre otavaleño y su madre de la capital de Cotopaxi, fue cariñosamente apodado así por su círculo cercano de amistades porque es intrépido y aventurero, según explicó vía telefónica a este Diario. “Te pareces a la guadaña de la muerte”, le han dicho en varias ocasiones. 

El 'Downhill' es una disciplina del ciclismo que él ha practicado por más de 14 años en los que ha competido en torneos locales, regionales, provinciales e internacionales. Pero el temerario ciclista tuvo que esperar al primer mes del 2019 para cumplir con aquel objetivo planteado después de mucha preparación -casi seis meses-  y contar con los permisos del Parque Nacional Cotopaxi y del Ministerio de Turismo. Una vez con todas las autorizaciones, se lanzó a cumplir con su proeza junto a su inseparable bicicleta a la cual define como “mi brazo derecho, mi esencia”.

El 9 de enero, Darwin y su equipo, de alrededor de 15 personas, ascendieron al volcán Cotopaxi. Pero no contaban con que el clima en el coloso podría cambiar y eso los retrasó un poco. “A las 12:00 de la noche teníamos previsto el ascenso y el clima cambió, hubo neblina y humedad que podía afectar a la bicicleta”. Pero gracias a los ánimos impartidos por Edgar Luje y Cristian Toapanta, iniciaron la aventura.

“La salida fue a las 02:00 y cuatro horas más tarde llegué al cráter”. “Me tomé cinco minutos para meditar y pedí permiso a la montaña para descender, porque siento un profundo respeto por la montaña” explicó 'Guadaña' quien también manifestó que gracias a la comunicación por radio escuchó las palabras de aliento de su madre que lo esperaba en el refugio.

El descenso total de Darwin Miranda tuvo una duración de 27 minutos. “27:01 marcó mi cronómetro desde el cráter a 5 897 m.s.n.m hasta los 3 800 m.s.n.m. un momento de emoción, adrenalina y ansias al estar solo con la montaña.” agregó. El trayecto desde el cráter del volcán Cotopaxi a decir del ciclista es una combinación de grietas que se “volvió más difícil al tener visibilidad nula por las condiciones climáticas de ese día, y tratar de no cometer errores”. “Se suponía que desde los 5 200 m.s.n.m se termina el glacial y empezaba el arenal pero ese día nevó mucho”.

La bicicleta europea, la “esencia” de ‘Guadaña’, estuvo equipada con amortiguadores grandes, frenos de disco hidráulicos y cuatro pistones. Las llantas con crampones son de fabricación propia con ayuda de uno de sus amigos.

“Llegué al refugio para cambiar de bicicleta, es decir cambiar las llantas con crampones para circular por la nieve y seguir el descenso. Con apoyo de mi familia y mi madre pude seguir pese al esfuerzo realizado” explicó Miranda,  quien insistió en la falta de visibilidad para continuar con el trayecto que fue 70% de la ruta normal con puntos de paso establecidos y que utilizan las personas para el ascenso “con algunas variaciones, por un costado de la ruta por ser una ruta demasiado estrecha que tocaba los pedales ” dijo ‘Guadaña’.

“Cuando llegué al cañón, divisé varios autos en la parte baja y sentí más emoción”. Finalmente, con lágrimas en los ojos por haber cumplido su sueño, fue recibido por su familia en la zona de la laguna de Limpiopungo. 

Ahora, después de cumplir ese reto personal y ser el pionero en realizarlo, ‘Guadaña’ cree que más personas se animarán a intentar un descenso de esta magnitud. “Siempre y cuando se cumplan con las exigencias de seguridad, guías para alta montaña y todo lo requerido por el Parque Nacional y el Ministerio de Turismo” dijo. 

La principal recomendación del deportista para este tipo de actividades es “enfocarse en la preparación; no importa cuál sea el sacrificio o la recompensa”.

'Guadaña' adelantó un detalle: el descenso por el Cotopaxi es el inicio de otras tres.  “Como proyecto para 2019, hasta marzo cuando el clima empieza a cambiar” finalizó Miranda.

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