Holanda y Estados Unidos se miden hoy (7 de julio del 2019), desde las 10:00, en la final del Mundial de fútbol femenino. Foto: AFP.
Dedicarse solo al fútbol profesional fue una de las decisiones más complejas que tomó la holandesa Jackie Groenen.
Cuando tenía 17 años, la holandesa alternaba su pasión por el balompié y por el judo. Jugaba en el Duisburg germano y un día antes de un partido de la Copa alemana sufrió una lesión de cadera, en una competencia de judo. Estuvo un mes fuera de las canchas.
Por acudir a la pelea, el club le sancionó y ella debió decidir entre el fútbol o el judo. Eligió el balompié y acertó. Se transformó en una de las jugadoras más importantes de Holanda. En el 2017 logró el título de la Eurocopa y hoy disputa el título mundial. Con la ‘Oranje’ se enfrenta a Estados Unidos (a las 10:00), en el Mundial de Francia por el título del Mundial femenino.
En las artes marciales, se destacó. Obtuvo la cinta negra a los 14 años. A la par, motivada por su hermana mayor Merel, incursionó en el fútbol, En la niñez, jugó en el Goirlese Sportvereniging Blauw-Wit. Con su hermana, también defendió los colores del VV Riel and Wilhelmina Boys y del SV Rood-Wit Veldhoven.
Ahora, defiende al FFC Frankfurt de la Bundesliga. Su gran ilusión es llevar el trofeo mundial a su país.
En las semifinales, marcó el gol que dio el triunfo 1-0 a su selección, ante Suecia, para clasificarse a la primera final de Holanda en una cita femenina.
Parecía que el partido se encaminaba a la definición de los tiros penales, pero la mediocampista marcó al minuto 99 y salvó a su equipo.
Morgan, líder en causas sociales y en su equipo
La delantera estadounidense Alex Morgan no pudo tener un mejor cumpleaños que el que celebró la semana pasada, en pleno partido ante Inglaterra, por las semifinales del Mundial femenino. Marcó el tanto que llevó a Estados Unidos a pelear por un cuarto título mundial.
Morgan, la futbolista más seguida en redes sociales, con 3,7 millones de abonados en Twitter y 7 millones en Instagram, lidera junto a su compañera Megan Rapinoe una encrucijada en búsqueda de igualdad.
El 8 de marzo, durante la jornada internacional de los derechos de la mujer, 28 jugadoras denunciaron a su federación por discriminación ante un tribunal de Los Ángeles. Reclamaron igualdad salarial con el equipo masculino.
Esta semana, la prensa local publicó que la Federación Estadounidense de Fútbol (USSF) y las jugadoras han comenzado una mediación sobre el tema.“Pensamos que batirse por la igualdad entre hombres y mujeres es una de nuestras responsabilidades. Como jugadoras, merecemos estar pagadas de la misma manera por nuestro trabajo, no importa el sexo”, señaló Morgan.
En esta edición del Mundial, considerado por Giani Infantino (presidente de la FIFA) como uno de los mejores de la historia), la delantera alcanzó a la inglesa White al frente de la tabla de goleadoras, con seis dianas, dejando atrás a su compañera Rapinoe, que no jugó el último partido por una lesión.
Su última anotación estuvo envuelta en la polémica. Su celebración, simulando tomar una taza de té, le obligó salir a defenderse frente a los medios.
Los ingleses reclamaron. Varias jugadoras se sintieron ofendidas por el gesto de Morgan. Pero ella gambeteó todas las acusaciones.“Sabía que Megan Rapinoe tiene las mejores celebraciones y quería intentar mantener el juego. Hemos estado aquí, sabemos cómo son las cosas, sabemos que a la gente le gusta inventar cosas sin saber, así que yo solo decidí beber un té”, explicó.
Hoy, frente a las holandesas, buscará seguir haciendo historia. En su palmarés ya tiene un título mundial (2015) y una Champions League (2017).
Suecia se quedó con el tercer puesto de la Copa
Con goles de Kosovare Asllani y Sofía Jakobsson, Suecia se quedó con el tercer puesto tras vencer 2-1 a Inglaterra. Para el equipo de los tres leones, descontó Fran Kirby.
Fue un cotejo intenso y emotivo para las suecas, que llegaron a esta instancia después de ser derrotadas en semifinales por las holandesas.
Las inglesas buscaron ser contundentes, pero se encontraron con un sistema defensivo que complicó a sus goleadoras.
Suecia dejó en el camino a Canadá, Alemania e Italia en una de sus mejores campañas en un Mundial.