La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) homenajeó el jueves a sus leyendas en un acto nostálgico en el que el gran ausente fue Raúl González Blanco. El delantero del Schalke 04 estaba anunciado entre los cuatro homenajeados por sus más de cien partidos con la selección, pero el miércoles por la noche excusó su presencia alegando falta de permiso para viajar por parte de su club. Sí estuvieron en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, muy cerca de Madrid, los otros “centenarios” españoles, Andoni Zubizarreta, Iker Casillas y Xavi Hernández, a quienes acompañaron Luis Aragonés, ex seleccionador, y Vicente del Bosque, actual técnico.
El emotivo acto resumió pasado, presente y futuro de la selección española. Comenzando por ésto último, la RFEF presentó la camiseta con la que actuará en la próxima Eurocopa y que estrenará el próximo sábado, con el amistoso ante Inglaterra en Wembley. “Esperamos reeditar con ella el éxito de Austria y Suiza”, dijo Casillas, capitán de la selección, junto a la prenda de aire “retro” que llevará serigrafiados en su espalda los números 1964 y 2008, los años en los que España logró sus dos títulos europeos. Posteriormente, los asistentes saludaron al nuevo inquilino del “Club de los 100”, Xavi Hernández, quien recibió la medalla de oro de la RFEF por sus 105 internacionalidades.
El jugador del Barcelona recibió el reconocimiento de manos de los dos últimos seleccionadores. Los fotógrafos aprovecharon el momento, pues no es fácil ver juntos a Aragonés y Del Bosque. “Representa muy bien lo que es el futbolista actual dentro y fuera del campo. Es un jugador singular, no encuentra parecido”, afirmó Del Bosque. Aragonés, uno de los técnicos que más favoreció el salto de Xavi hacia el estrellato, destacó su “calidad humana” y sus “condiciones para jugar de forma extraordinaria”.
La siguiente parte del acto sirvió para recordar los cinco goles históricos del fútbol español, plasmados en cinco cuadros del pintor Andrés Sánchez que colgarán en el museo que la RFEF tiene en su sede de Las Rozas. El primero lo logró Telmo Zarra ante Inglaterra en 1950 para meter a la selección por primera vez entre los cuatro primeros de un Mundial; el segundo fue de Marcelino en 1964, que dio la victoria en la Eurocopa; el de Kiko en 1992 proclamó campeona olímpica a la “Roja”; el de Fernando Torres en 2008 significó el título europeo, y el de Andrés Iniesta el año pasado fue el 1-0 en la final del Mundial de Sudáfrica.
“Soy afortunado de haber vivido algo así en primera persona”, dijo este último. Entre los asistentes estaban los familiares de Zarra y un Torres que se esforzó por quedar alejado de los focos. Finalmente, se subieron al estrado Casillas, Xavi y Zubizarreta, actual director deportivo del Barcelona, para recibir la medalla de la Unión Europea de Fútbol Asociado (UEFA) que los distingue como futbolistas con más de cien internacionalidades con su país. “Siempre estoy orgulloso de venir aquí y representar a la federación”, dijo Xavi, cerebro del admirado Barcelona y de la España campeona de Europa y del mundo.
“Cuando haces algo donde te lo pasas bien no te enteras de cómo pasan los años”. Varios eran los años que Raúl llevaba lejos de la selección, desde que Aragonés decidió dejarlo fuera del equipo tras la derrota de España en Irlanda del Norte en septiembre de 2006. La salida del ex madridista no fue amistosa y generó un largo debate entre los que creían que debía volver y los que no. Por eso, su presencia en la casa de la federación causó gran expectación.
Según la RFEF, sin embargo, el Schalke 04 no autorizó el viaje del jugador al tener programados para hoy dos entrenamientos. Fue el gran ausente de una mañana con una tremenda carga de nostalgia. Aunque, como recordó Xavi, tanto él como sus compañeros esperan seguir “muchos años más” en una selección que vive su “edad de oro”.