El entrenador uruguayo Jorge Fossati (Al Sadd), única presencia de su país en el Mundial de Clubes de Japón 2011, dijo sentirse ilusionado con su participación en el que considera “el mayor torneo de clubes”, donde su equipo catarí debuta el domingo ante el Esperance tunecino.
Ese partido decidirá uno de los semifinalistas, el que se enfrentará el jueves 15 al FC Barcelona, campeón de España y Europa, en Yokohama.
“En el fútbol profesional, tener éxito se mide a menudo en función del resultado y eso lo determinará. Este es un torneo muy especial, el mayor torneo de clubes que existe en el mundo”, destacó, situándolo por encima de la Liga de Campeones europea o la Copa Libertadores sudamericana en importancia.
“Somos conscientes de que no tenemos la experiencia de otros equipos. Venimos por lo tanto con mucha humildad y si podemos conseguir resultados, serán bienvenidos”, apuntó en su rueda de prensa de este sábado sobre las expectativas con las que ha llegado a Japón el club de Catar.
Fossati llegó este mismo año al Al Sadd, al que ya había llevado al título nacional en 2007, y no tardó en conseguir buenos resultados, conquistando por sorpresa la Liga de Campeones asiática en noviembre. Como su homólogo del Esperance Nabil Maaloul, el DT uruguayo dijo haber pedido a sus jugadores que no piensen en la posibilidad de jugar ante el Barcelona y se centren únicamente en el partido del domingo.
“Siempre hemos ido así, yendo partido a partido, sin pensar más allá. El siguiente rival es siempre el más importante. Tenemos que pensar en el Esperance, enfocar todas las energías en él, de nada vale pensar en el siguiente rival si no ganamos a éste”, apuntó. El entrenador montevideano, portero de Peñarol en sus mejores días como jugador, estuvo acompañado en su rueda de prensa por dos de sus jugadores, uno de ellos el delantero marfileño Kader Keita, ex del Lyon francés y una de las estrellas del equipo.
“Todos hablan del Barcelona y sería un placer poder jugar contra ellos, aunque lo más importante para nosotros en este momento es ganar al Esperance”, afirmó Keita, que conoce bien al Esperance por su etapa de 2000 a 2002 en otro equipo tunecino, el Etoile Sportive du Sahel. El centrocampista Talal Albloushi también subrayó la importancia del partido contra el Al Sadd: “ No es sólo un partido de árabes, sino de un Mundial. El equipo tunecino es grande y el catarí también lo es. Será difícil”.