La Policía redobló las seguridades en el estadio Banco Pichincha, donde se realizó el cotejo entre Barcelona y Liga de Quito. Fuera del escenario, en los parqueaderos, y especialmente en el ingreso a la general sur, la Policía dispuso un férreo control desde el mediodía.
Aproximadamente 200 uniformados fueron destinados a la protección, la revisión de los seguidores y el control a la venta de bebidas alcohólicas.
Fue inusual para los hinchas de Barcelona toparse con los ingresos al estadio ausentes de las tradicionales carpas cerveceras. Para saciar la sed de la masa de hinchas amarillos que empezaba a enfilar hacia el estadio, había aguas embotelladas, colas, granizados y frescos de dudoso origen.
Jaime Arroyo, esmeraldeño residente en Bastión Popular, populoso sector en el norte de Guayaquil, llegó a las 14:20 con un grupo de tres amigos. La ausencia de bebidas alcohólicas afuera del estadio le llamó la atención. “Y bueno, no hay biela pero sí buena vibra, lo importante es que vamos a ganar…”, vaticinó.
El ingreso de la hinchada de Liga estaba previsto desde las 15:00. Pero ya para las 14:30 la Policía y la Comisión de Tránsito del Ecuador empezaban a restringir el acceso por la avenida Barcelona, la única que conecta directamente con el Monumental. Hasta ese momento se mantuvo en reserva por dónde ingresarían los albos.
Las medidas de seguridad se extremaron conforme se acercaba el inicio del cotejo. Cinco policías se ocuparon de hacer el ‘cacheo’ a los hinchas toreros que, con tambores y banderas, se apretujaban para ingresar por la general sur.
Los hinchas que parecían sospechosos de portar algún objeto no permitido dentro del estadio eran sacados a un costado y sometidos a una revisión más rigurosa.
Aunque las seguridades se reforzaron dentro y fuera del Monumental, la presencia policial fue escasa en torno a la hinchada de Liga que arribó para ver el partido desde otras ciudades.
A las 10:00, solo cuatro uniformados permanecían en un patrullero en el punto de concentración de los hinchas albos, en la explanada del estadio Modelo Alberto Spencer. A esa hora ya había alrededor de 100 hinchas de Liga preparándose para dirigirse, en buses contratados, al Monumental.
Frente a la presencia del equipo periodístico de este Diario, un grupo de hinchas, descamisados y visiblemente bajo los efectos del alcohol, intentó en ese momento impedir la cobertura.
La escasa presencia de policías fue aprovechados por el grupo de aficionados para agredir al fotógrafo de este Diario, mientras dos periodistas recogían datos.
En ese momento, mientras se entrevistaba a uno de los dirigentes, otros hinchas empezaron a exigir que no se hicieran fotografías. Todo sucedía a 100 metros de distancia del Centro de Vigilancia Comunitaria, ex Cuartel Modelo de la Policía. “¡No tomes fotos, lárgate de aquí!” gritaban intimidantes al fotógrafo.
La Policía llegó 15 minutos después con refuerzos. Alrededor de 40 uniformados, comandados por un teniente coronel que evitó en todo momento identificarse, realizaron en ese momento un requisa entre los presentes.
Por el incidente, dos personas identificadas como hinchas de Liga fueron detenidas y conducidas a la Policía Judicial del Guayas.
Sin incidentes
En los ingresos a los sectores de tribuna y preferencia del Monumental hubo poco personal policial. La mayoría se concentró en la general sur.
Mujeres policías se intercalaron en los accesos para hacer el ‘cacheo’ a las hinchas barcelonistas.
La ausencia de las carpas cerveceras fue suplida por carpas de venta de gaseosas y una mayor cantidad de puestos de comidas.
La seguridad privada se encargó únicamente de la revisión de los boletos de los hinchas para los diferentes sectores.