Han pasado cuatro años desde que el 29 de junio del 2008 un gol de Fernando Torres a la Selección de Alemania cambiara la historia de los españoles. La ‘Roja’ conquistó el título de la Eurocopa tras 44 años.
Dos años después, levantó la Copa del Mundial de Sudáfrica 2010. Hoy, está a puertas de ser leyenda en la final de la Eurocopa, en la final ante Italia y conseguir su tercer título consecutivo.
Tres finales en cuatro años. Es una gesta que solo protagonizó Alemania cuando el fútbol no era tan físico ni parejo. Esos triunfos coronaron éxitos obtenidos en otros deportes y apagaron las críticas sobre el balompié, que parecía ser una maldición.
La última década ha sido inolvidable para los ibéricos. En motos, Alex Crivillé auguró unos años brillantes. Luego, llegaron los títulos de los motociclistas Dani Pedrosa, Jorge Lorenzo, Álvaro Bautista, Julián Simón, Toni Elías, Marc Márquez, Nani Roma y Marc Coma.
Rafael Nadal se volvió un rey en el tenis y sumó siete títulos de Roland Garros. Fernando Alonso conquistó un bicampeonato en la F1 y hoy es líder del Mundial, la Selección de baloncesto alcanzó la final de Europa en el 2011…
El fútbol se vio más fortalecido con el estilo preciosista y ganador desplegado por el Barcelona de Josep Guardiola y el agresivo estilo del Real Madrid, dominadores en España y en Europa.
¿A qué se deben los éxitos? El tenista Emilio Sánchez Vicario, en diario El Mundo, dio la respuesta: “Los triunfos del deporte español se deben a cuatro ‘c’: cabeza, condición, corazón y cojones”.
Esto, según su criterio, se debe a un proceso en el que cada generación ha superado a la anterior. “Los atletas españoles, ahora, cumplen un proceso en el que cada generación ha ido superando a la anterior”.
El prestigioso diario español también analiza otras causas del resurgimiento. Una de ellas es el apoyo económico de un programa para los atletas. En un análisis se dijo que “el impulso del programa ADO, que permitió que nuestros mejores atletas pudiesen dedicarse mejor y más a la preparación. Se desterró el concepto de ir a las competiciones y no ganar”.
En el otro frente está Italia, con una serie de antecedentes. Italia busca el título para reconciliarse con los ‘tifosi’ (hinchas) luego de su mala actuación en el Mundial de Sudáfrica en 2010, donde no pasaron de la primera ronda, pese a ser los campeones defensores.
A diferencia de los españoles, los italianos afrontan un claro declive en su acontecer deportivo. La escudería Ferrari no gana un título de constructores desde el 2008 , Valentino Rossi ya no domina en el Moto GP y el fútbol local está sacudido por los escándalos de apuestas y corrupción.
En competencias europeas, el Inter, la Juventus y el AC Milan observan de lejos como el Real Madrid y el FC Barcelona acaparan los flashes de los fotógrafos y los elogios de la prensa deportiva.
Un trofeo futbolístico reanimaría los ánimos de aquellos aficionados que sueñan con mirar a la ‘Azzurra’ de vuelta a la élite.
Italia ya demostró que puede superar las adversidades, como sucedió en el 2006. Ese año, la escuadra triunfó en la Copa del Mundo, pese a que el fútbol local tuvo que afrontar problemas con la justicia.
De conseguir el título, los italianos lograrán poner una cortina a la cantidad de escándalos de corrupción que han manchado a los equipos y a los torneos italianos.
Italia desea regresar a la gloria en el fútbol
En Alemania 2006. La Selección italiana de fútbol ganó la Copa del Mundo 2006, tras vencer en penales 5-3 a Francia. Fue el último título importante de los ‘azzurri’.
La corrupción en el ‘calcio’. En 2006 la Juventus (foto) fue despojada de su título de primera división por arreglo de partidos y descendió a la Serie B del fútbol italiano.
El deporte español, en etapa de crecimiento
El triunfo de Sudáfrica. España se consolidó con la obtención del Mundial 2010. En esa final derrotaron 1-0 a Holanda con un gol de Andrés Iniesta, cuando se jugaba el tiempo suplementario.
El ‘Barça’ es el rey europeo. El FC Barcelona de España es uno de los mejores equipos de la actualidad. En la foto se puede ver
la obtención del Mundial de Clubes en diciembre del 2011.