Cero violencia en el interior de los estadios y que la cifra de 27 detenidos que se registró en el 2011 no ascienda este año. Ese es el sueño de los líderes de la Policía Nacional del Distrito Metropolitano y de los dirigentes de los clubes El Nacional y Liga de Quito, y de la Asociación de Fútbol No Amateur de Pichincha (AFNA).
Eso fue lo que ellos expresaron ayer en una reunión, auspiciada por los miembros de la Policía, en el auditorio del Regimiento Quito nro.1, en el norte de Quito.
El encuentro se realizó para hablar de la creación de una campaña que erradique la violencia en el interior de los estadios. Eso, a propósito de los desmanes suscitados en el partido amistoso entre Deportivo Quito y Liga, y el cotejo oficial entre El Nacional y Técnico Universitario del domingo.
En este último cotejo, jugado en el estadio Olímpico Atahualpa, aficionados de El Nacional recibieron a los jugadores del equipo contrario con pedradas.
La intervención de la Policía impidió que las agresiones trascendieran. “¿Cómo es posible que sucedan estos actos?”, se preguntó Jorge Velásquez, presidente de la Asociación Provincial.
Según datos revelados por el teniente coronel Juan Zapata, en tres cotejos realizados en este año se registraron ya 11 civiles heridos en Quito. Esa cifra supera a la del año pasado, en que se contabilizaron 10 civiles heridos, pero en 134 eventos.
Esos datos alarman a la Policía, por eso se comunicaron con dirigentes y líderes de las barras bravas para unir fuerzas y evitar más heridos, arrestados y muertos.
Los barristas jamás llegaron a esta reunión. Eso apenó a los creadores de la iniciativa. Según Juan Carlos Rueda, comandante del Distrito Metropolitano de Quito y promotor de la idea, los líderes de las barras no asistieron porque “saben que infringen la Ley”.
A la reunión tampoco llegaron los dirigentes del Deportivo Quito ni de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF).
Ante la falta de esas figuras, el teniente Zapata dijo que los llamará para una nueva reunión. “Los líderes de las barras tendrán que sentarse a hablar”, manifestó.
Mientras se planifica una nueva cita, la Policía pidió a los dirigentes de Liga, El Nacional y AFNA que les prestaran las facilidades para realizar su trabajo.
Entre las peticiones que citó el coronel Santiago Rosero están: invertir en la infraestructura adecuada para impedir que los hinchas se agredan. “A veces es importante sacrificar la taquilla”.
Julio Álvarez, gerente del estadio Casa Blanca; y Patricio Ramírez, del control de seguridad, se pusieron a las órdenes de la Policía. La actitud fue destacada por Velásquez, que mientras participaba de la charla, recordaba el tiempo en el que las barras de ambos clubes compartían las gradas.