Una polémica de grandes proporciones empezó hoy en Colombia a raíz de unas palabras del presidente del club de primera división Itagüí, Fernando Salazar, quien dijo que los futbolistas actúan como prostitutas cuando negocian contratos.
Salazar hizo el comentario este martes durante una asamblea de presidentes de clubes, en la que se definió el calendario del Torneo Apertura, que empezará en febrero.
Durante la reunión se analizó el caso del volante Yhonny Ramírez, que es disputado por Millonarios de Bogotá, el actual campeón del fútbol colombiano, y el Boyacá Chicó de Tunja.
Ramírez jugó el año pasado a préstamo en Millonarios, pero Boyacá Chicó quiere tenerlo de regreso en la temporada próxima a empezar.
En medio de las discusiones de los presidentes de Millonarios y de Boyacá Chicó, el representante de Itagüí intervino para hacer la polémica afirmación.
“Los jugadores de hoy son unas prostitutas vestidas de uniforme de fútbol. Con absoluta tristeza lo digo, y se venden al mejor postor“, dijo Salazar, lo que originó críticas de varios de sus homólogos.
La controversia llegó hasta las altas esferas del gobierno, donde el vicepresidente, Angelino Garzón, exigió a Salazar que presente disculpas por sus palabras.
“El doctor Fernando Salazar ofendió a los jugadores. ¡Cómo les va a decir prostitutas! Se le olvidó algo tan elemental como saber que los jugadores tienen derechos y que ellos como dirigentes tienen deberes y uno de ellos es el respeto”, dijo Garzón.
El vicepresidente dijo que afirmaciones de ese tono podrían llevar a los futbolistas a convocar a una huelga para protestar. “Él tiene que salir a pedir perdón a los jugadores y a la población colombiana. Los dirigentes tienen que ser cuidadosos con lo que dicen”, añadió Garzón.
Asimismo, el vicepresidente dijo que el gobierno apoya la decisión de la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales, que anunció el envío de una grabación de las palabras de Salazar a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y a la FIFA, en busca de eventuales llamados de atención o sanciones contra el dirigente.
“Que los jugadores de fútbol entiendan que la vicepresidencia apoya esa petición porque contra ellos ha habido una ofensa como jugadores y como trabajadores. Tenemos que rechazar ese tipo de declaraciones y llamar la atención de los dirigentes porque esas palabras ofenden a los futbolistas como seres humanos”, expresó Garzón.