Con goles de Alfredo Ramúa y Cristian Gómez, el Olmedo se impuso 2-0 a Liga de Quito. El equipo albo terminó el encuentro con nueve jugadores, al ser expulsados los defensas centrales Diego Calderón y Jorge Guagua. Pero las expulsiones no influyeron en el resultado, ante un plantel riobambeño ordenado.
El encuentro fue parejo en la mitad de la cancha. El ‘Ídolo de Riobamba’ planteó un sistema 4-4-2, para detener a los habilidosos jugadores de Liga, en la mitad del campo. El técnico montenegrino Dragan Miranovic supo controlar el ímpetu de los capitalinos. Por ello, los volantes Miler y Luis Bolaños no crearon jugadas de peligro en el arco local.
A los ocho minutos, Miler remató desde fuera del área. El disparo inquietó al arquero Róbinson Sánchez, quien se estiró para desviar el esférico. Desde ese momento, el equipo albo utilizó como arma los remates de media distancia. Los encargados de realizar los tiros fueron Hernán Barcos y Ezequiel González.
Luego, los dos jugadores extranjeros fueron marcados por la defensa local y bajaron su nivel. Por su parte, los olmedinos apelaron en la primera etapa a los contragolpes de Ramúa y Gómez, que inquietaron al golero Alexander Domínguez.
A los 45 minutos, el juvenil Jacob Murillo recuperó un balón de la línea lateral. Él envió un centro a la mitad del campo que aprovechó el argentino Ramúa para enviar el balón al fondo de las piolas. Con la ventaja en el marcador, los jugadores riobambeños se fueron serenos al camerino. Mientras que los albos lucieron preocupados, pues no exhibieron ese fútbol contundente como en Quito.
En la segunda etapa, el técnico de la Liga, Edgardo Bauza, ingresó a Diego Calderón por el argentino-ecuatoriano Norberto Araujo, quien salió con molestias en su espalda. De hecho, su presencia para este encuentro era una incógnita. Además, la idea era refrescar a un jugador que viene de competir con la Selección en la Copa.
Los tres defensas, Jorge Guagua, Calderón y Marlon Ganchozo no se acoplaron. Los jugadores salían a destiempo en las marcas y en los mano a mano los olmedinos ganaban. Por ello recurrieron a las faltas y el árbitro José Espinel expulsó a Calderón y a Guagua.
Espinel sacó siete tarjetas amarillas, la mayoría para los albos.
El DT Bauza intentó recomponer la figura con la entrada de Enrique Gámez, pero solo estuvo 15 minutos porque también se lesionó en un pique. Lo reemplazó Paúl Ambrosi.
Con nueve jugadores y sin sus estrellas inspiradas, los dos Bolaños y el ‘Pirata’ Barcos, los liguistas se perdieron. Mientras que los riobambeños fueron precisos y atacaron por los costados.
El pequeño Ramúa puso pases en profundidad para Christian Gómez y Marco Romero. Pero los dos desaprovecharon las oportunidades ante las salidas del guardameta Domínguez.
A los 74 minutos, Romero ingresó por la mitad de la zaga alba y fue derribado. Espinel decretó el tiro penal y la segunda tarjeta amarilla de Calderón. El ‘camello’ Gómez concretó el gol y fue aplaudido por los cerca de 3 000 aficionados que arribaron al Olímpico de Riobamba. Los albos salieron desmoralizados.
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