Un total de 62 personas fueron detenidas el viernes, 06 de septiembre, en Bucarest y dos gendarmes resultaron heridos en los enfrentamientos previos al partido de clasificación para el Mundial-2014, Rumania-Hungría (3-0), anunció este sábado la gendarmería rumana.
Dieciseis aficionados húngaros fueron castigados con la prohibición de acudir a estadios de fútbol durante un año, precisó el jefe de la gendarmería, Mircea Olaru.
Enfrentamientos entre aficionados húngaros, que en número de 2 000 hicieron el desplazamiento a Bucarest, y fuerzas del orden se registraron antes del partido. Los gendarmes utilizaron gases lacrimógenos.
Varias decenas de aficionados rumanos, a los que los gendarmes impidieron aproximarse a los seguidores húngaros, lanzaron a su vez piedras a las fuerzas del orden.