Luciano Figueroa prefirió reír ayer cuando un grupo de periodistas le preguntó si se encontraba lesionado.
Guardó silencio por unos segundos y repitió lo que ha dicho durante las últimas 48 horas cada vez que lo abordan para consultarse sobre ese tema: “Estoy bien. No existe ninguna lesión. Es solo un rumor”.
El delantero de 30 años, que juega en Emelec, desmintió ayer tener una supuesta hernia discal en su columna. Lo hizo después de entrenarse al mismo ritmo e intensidad que el resto de sus compañeros.
Durante hora y media participó en la práctica de fútbol en espacios reducidos que realizaron los azules en la cancha sintética del Colegio Americano, ubicado en el norte de Guayaquil.
El grupo no se entrenó en el complejo Los Samanes debido al mal estado de la cancha causado por la fuerte lluvia que cayó la madrugada y mañana de ayer.
‘Lucho’, como se lo conoce al atacante, se movió sin problemas e incluso marcó dos goles durante el entrenamiento. Saltó, cabeceó y chocó con sus compañeros cuando le tocó disputar la pelota.
Pero el jugador reconoce que las lesiones han sido un karma a lo largo de su carrera. Una de las fracturas que más lo marcó fue la que sufrió en el 2006 cuando militaba en River Plate (Argentina).
En un partido contra Estudiantes de la Plata, sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco interno de la rodilla izquierda. “Esa ha sido la peor lesión de mi carrera porque me alejó cerca de cuatro meses de las canchas”, confesó el jugador.
Pero a más de eso, esta lesión le impidió hacer realidad dos sueños pendientes: le impidió jugar el mundial de Alemania 2006 con la Selección argentina que dirigía el estratega José Pekerman y debutar en la segunda en club Genoa, de la Serie B de Italia.
Según el fisioterapeuta del club, el cubano José Amador, de esa lesión no quedan rastros en la rodilla del jugador.
Por lo pronto, según aclaró, Figueroa se encuentra recuperando su estado físico ya que antes de ser contratado por los millonarios estuvo más de seis meses sin entrenarse activamente.
Otras lesiones
Las distensiones musculares han sido constantes en la carrera de Figueroa, quien debutó profesionalmente en el 2001.
Actualmente asegura sentir una leve molestia en su espalda, pero desmintió que se trate de una hernia discal. No jugará este fin de semana ante Olmedo.