Los cerca de 3 500 seguidores de Liga de Quito que llegaron ayer al estadio Bellavista se llevaron un susto antes de finalizar el cotejo frente a Macará de Ambato.
La causa fue la expulsión de Alexander Domínguez, por la agresión al delantero local Alan Sánchez. Eso ocurrió tras el gol conseguido por Michael Endara para los locales. Como Liga había completado su cupo de cambios, Ignacio Canuto se sacrificó por el equipo y terminó atajando.
Los últimos minutos fueron de desesperación extrema. Los locales buscaban rematar desde cualquier lugar para vencer a Canuto, pero los albos regularon el juego gracias a Édison Méndez, el experimentado volante convertido en su figura más importante.
Liga se agrupó y salió en rápidos contragolpes en esos minutos y fue así que Gustavo Bou evadió al arquero Cristian Mora y de toque suave convirtió el tercer tanto, con que concluiría el encuentro. El gol lo festejaron con baile y música los seguidores visitantes que se ubicaron con banderas, tambores y pitos en la parte oriental del estadio.
A los tiempos que la ‘U’ tiene un final feliz. Es más su último triunfo data de hace dos meses, concretamente el 13 de julio, en el inicio de la segunda fase, cuando se impuso a Deportivo Cuenca por 3-0 en el Alejandro Serrano Aguilar. Eso hace abrigar esperanzas a sus seguidores de que pueda seguir peleando las primeras posiciones, tal como lo indicó durante toda la semana pasada su entrenador, Edgardo ‘Patón’ Bauza.
Pese a la abultada victoria, en el inicio del juego, el Macará se mostró compacto e intentó hacer daño. Pero de a poco, los jugadores azucenas controlaron el juego. Ellos se adelantarían en el marcado a los 14′. El defensa Luis Carlos en el despeje del esférico en el área metió la mano. El árbitro Omar Ponce decretó la pena Máxima. Méndez marcó el 0-1.
‘Kinito’ fue el comandante que Liga necesitaba y sus asociaciones permanentes con los delanteros Jaime Ayoví y Gustavo Bou generaron las cargas de mayor peligro.
La buena noticia para la ‘U‘ es que Ayoví también marcó, así como Bou. Fue un domingo feliz para los albos que tras el partido volvieron a la capital.
Edison Méndez Condujo a su equipo a conseguir la victoria En el mediocampo fue quien puso orden. Hizo prevalecer su experiencia ante el elenco de Macará. Asimismo, controló el balón en el momento indicado, especialmente en los últimos 10 minutos, tras la expulsión de Domínguez.
Luis Carlos Falló constantemente para marcar a los rivales No pudo controlar a los delanteros de Liga. Las fallas constantes hicieron que cometiera en un ataque de los blancos un penal. También falló en los otros dos goles con que ganó liga 3-1. Le falto tranquilidad y orden en el partido.