Faltarían adjetivos para calificar lo que hicieron anoche Hernán Barcos y Ezequiel González en la victoria de Liga de Quito ante Vélez Sarsfield, por 2-0.
Los dos argentinos unieron su talento; Barcos su efectividad y viveza para definir y el ‘Equi’ González su inteligencia con la pelota. Con estas virtudes la ‘U’ ganó el partido de ida por la semifinal de la Copa Sudamericana.
Con la ventaja de los dos goles, Liga deberá devolver la visita a Vélez, el martes, en Argentina.
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Fue un cotejo jugado con mucho vértigo en una cancha más rápida de lo habitual por el aguacero que cayó antes del partido. Para conseguir los dos goles de ventaja los locales tuvieron que sufrir y correr bastante. También el equipo albo necesitó mucha paciencia porque Vélez Sarsfield demostró que es un equipo que sabe jugar en la altitud de Quito.
Tuvo que llegar el minuto 4 del segundo tiempo para que la hinchada (20 000 llegaron al estadio) pudiera desahogar su primer grito de gol. Fueron los socios González y Barcos que tuvieron que aparecer para anotación.
González aprovechó la equivocación del volante de Vélez, Héctor Canteros, que perdió la pelota. González disparó y en el trayecto la pelota se desvió en su compañero de fórmula: el ‘Pirata’ Barcos, quien recibió finalmente la autoría de la anotación.
Un gol tan añorado por lo hecho en el primer tiempo donde se trabajó mucho. Una etapa en la cual el portero Marcelo Barovero fue figura, ayudado también por el poste en un remate de Barcos.
Liga fue una avalancha en el cuarto de hora de iniciado el partido. Tuvo la pelota, fue atrevido, atacó y asfixió a la visita. Presionó en su cancha a Vélez y coqueteó con el gol constantemente. Los remates de Fernando Hidalgo, Miler Bolaños y González exigieron al portero Marcelo Barovero.
En total, fueron ocho disparos sobre el arco visitante. A partir del minuto 20, los argentinos reaccionaron ante los gritos de Ricardo Gareca.
Luego, el gol tempranero de la complementaria obligó al cuadro de Gareca a adelantar líneas para conseguir la igualdad.
El lateral Emiliano Papa fue peligroso. Desbordó y en un mano a mano con Alexander Domínguez le ganó el arquero. En otra acción, Paúl Ambrosi debió sacar una pelota de la línea de meta.
Liga sintió la presión de su rival y a momentos un cansancio físico. Sin embargo, las ganas de otra estrella internacional inyectó fuerza a los jugadores albos. González estuvo cerca de poner su gol con un disparo medido; sin embargo, Barovero encontró en otro vertical su mejor aliado.
En el minuto 82, una triangulación entre Néicer Reasco, González y Barcos permitió al ‘Pirata’ romper el fuera de juego, quedar solo ante Barovero y fusilarlo a placer con un cañonazo que cerró esta primera semifinal.
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