Independiente puso la fiesta. En la tribuna local, una banda de pueblo, integrada por 10 músicos, puso el toque colorido. Vestidos de traje negro y camisa blanca, la banda animaba a los aficionados con sus melodías.
Sin embargo, en la cancha la alegría la puso el equipo visitante. Liga demolió a su rival y supo lastimarlo en los momentos claves del partido. Ya en el final del primer tiempo ganaba por 3-0 y en el segundo tiempo solo tuvo que esperar a su rival y lastimarlo en los momentos justos.
Los albos cumplen una apretada agenda de juegos por su presencia en la Copa Sudamericana y en el torneo local. Para el equipo de Edgardo Bauza, las oportunidades que se le presentaron ayer fueron un bálsamo en medio de tanto ajetreo de partidos.
Liga resolvió rápido el partido a su favor: a los dos minutos ya ganaba con un fuerte remate de Ulises de la Cruz. Tras encontrar el gol, los albos se dieron tiempo para esperar a su rival, que se lanzó aceleradamente a buscar la igualdad. Entre los 15 y 30 minutos, Alexander Domínguez se convirtió en figura al contener remates consecutivos de Daniel Samaniego y de Fernando Guerrero.
Pero Liga no pasó por mayores problemas. Independiente se fue diluyendo e incluso perdió a Víctor Chinga, quien fue expulsado por una supuesta infracción a Néicer Reasco y Liga definió en los últimos 15 minutos del primer tiempo el partido a su favor. Primero con el tanto de Juan Salgueiro de penal, a los 34 minutos (su octavo tanto en el torneo) y posteriormente con la anotación de Carlos Luna, en los adicionales del primer tiempo.
En el segundo tiempo, la banda de pueblo seguía animando a los 10 000 aficionados que acudieron al estadio de Sangolquí. Los más felices sin duda, eran los seguidores del cuadro visitante, que incluso se animaban a menearse al compás de la música.Los azucenas manejaron a su antojo los tiempos del partido en el segundo tiempo: tenían todo a su favor: tres goles más y un jugador más que su rival. El técnico Julio Asad intentó mejorar la contención en la línea de volantes con el ingreso de Édder Valencia y de Sergio Cedeño. Pero los cambios no dieron resultados.
Liga tenía a merced a su rival y cuando decidió adelantar sus líneas encontró la manera de continuar lastimando a un adversario descompensado y desesperado. Gonzalo Chila ingresó y también logró su tanto, a los 77 minutos.
Los visitantes se dieron el lujo de hacer más de 25 toques ante la incapacidad de su adversario para quitarles el esférico.
Liga cumplió con su objetivo: vencer al Independiente, adueñarse del liderato del campeonato a falta de cuatro fechas (tiene 39 puntos, uno más que Deportivo Cuenca que juega hoy ante el Olmedo).
Ahora los albos se concentrarán para viajar mañana a Rosario (Argentina), en donde se enfrentarán el martes con Newell’s por la Copa Sudamericana.