Cuando terminó el primer tiempo del partido, el Independiente ganaba 2-0 y el árbitro Daniel Salazar expulsó al volante del Manta Carlos Hidalgo (por insultos a un rival). Todo anticipaba que vendría una goleada en la segunda fase.
Pero el efecto desmoralizador de tener un hombre menos en la cancha se revirtió en el club manabita, lo que demuestra el trabajo de camerino desarrollado por el técnico Fabián Bustos.El 4-4-1 (y a veces 5-4 ó 4-5, de acuerdo con las circunstancias) implementado por el argentino formó una muralla casi infranqueable para el club local, durante todo el segundo tiempo.
A la estrategia del visitante se sumó la lesión del volante de creación Fernando Guerrero, en el minuto 43 de la primera etapa. El joven talento ecuatoriano fue aporte fundamental para el triunfo parcial del Independiente.
Al minuto 20, el ‘Chiqui’, como también le dicen al jugador, eludió con clase la marca de dos rivales y armó la jugada para el primer gol de su equipo. Una gran definición de Richard Estigarribia, quien recibió la pelota en el área, dio media vuelta y disparó bajo junto a uno de los laterales.
Luego, en el minuto 32, Guerrero asistió con un pase profundo al área. Estigarribia, otra vez con excelente definición, transformó el segundo de su club y el décimo en su cuenta personal.
Fue un primer tiempo casi perfecto. Todo le funcionó bien al estratega argentino Guillermo Duró, especialmente en el ataque, donde también cumplieron una brillante actuación Daniel Samaniego y Johnny ‘Rayo’ Baldeón.
Con el 2-0, el buen fútbol y la expulsión de Hidalgo, la fiesta se prendió en el estadio de la cabecera cantonal de Rumiñahui. Cerca de 1 000 hinchas bien organizados en la barra de la tribuna principal festejaron los goles del paraguayo. Cantando y alentando al equipo, los fanáticos presagiaban la goleada.
Pero como en el fútbol nada está escrito, el Manta salió para la segunda etapa muy decidido a ‘darle la vuelta’ al partido. Sus jugadores cubrían todo el campo y corrían tras el balón. Eso se demostró al primer minuto de juego del segundo tiempo cuando el argentino Maximiliano Bevacqua anotó el gol del descuento.
Ese tanto se originó ante una sorpresiva y contundente jugada que salió de la mitad de la cancha, tras un desborde de Narciso Mina. Este superó la marca por derecha y lanzó un centro preciso para que el gaucho definiera.
A partir de este instante, comenzó a funcionar la estrategia de Bustos diseñada en el camerino. Puso una doble fila de cuatro hombres y dejó adelante a Bevacqua. Esa táctica se reforzó al cortar con eficacia las jugadas cerca del área y buscando el contragolpe por medio de Mina y, a veces, con Marlon Moreno.
Con la ausencia de Guerrero, el Independiente perdió velocidad y creación en la línea de volantes. Samaniego no fue el mismo y Estigarribia disminuyó su nivel.
Sin embargo, cabe destacar las actuaciones de Anderson Caicedo y de Armando Wila. Ambos se juntaron bien en el ataque y crearon al menos tres ocasiones de anotar, pero resolvieron mal frente al golero Francisco Caicedo.
A esa altura del cotejo, el arquero del club manabita se convertía en la figura de su equipo, ya que a pocos minutos del final atajó un disparo de Estigarribia.
En las instancias finales del encuentro, más pudo el orden y la entrega del equipo visitante, donde figuraron además Christian Gómez y Kléber Andrade, que la desesperación del local, al ver que nuevamente un triunfo se le escapaba de las manos. Alegría y tristeza, las dos caras del fútbol.
La figura
Richard Estigarribia convirtió dos golazos
El atacante paraguayo tuvo un excelente desempeño en la primera etapa. Abrió los espacios para que sus compañeros llegaran con claridad y cuando tuvo la oportunidad lo hizo con clase. Lamentablemente para Estigarribia, y para su club, se quedó sin uno de sus principales abastecedores, Fernando Guerrero.
La contrafigura
Carlos Hidalgo perdió la cabeza en Sangolquí
El experimentado mediocampista guayaquileño, que juega en el Manta, se ‘desubicó’ en la cancha de Independiente. En esa área tuvo un intercambio de palabras con el juvenil Andrés Oña. El árbitro del encuentro, Daniel Salazar, dijo que expulsó a Hidalgo por insultar al jugador del club de Sangolquí.