Sabrina Fernández y Alan Lorentti, hinchas argentinos de Boca Juniors, caminaban por las calles de Quito el 7 de julio del 2016. Foto: Carlos A. Rojas / EL COMERCIO
Sabrina Fernández y Alan Lorentti caminan por Quito con esa tranquilidad y despreocupación que tienen los turistas. Circulan por las remodeladas aceras de las avenidas Naciones Unidas, 6 de Diciembre y otras que están cerca del estadio Olímpico Atahualpa, en el centro norte de la capital ecuatoriana.
Transitan, conversan, observaban. Lucen contentos camisetas del Boca Juniors, equipo argentino que este 7 de julio visita al Independiente del Valle en el escenario de El Batán (19:45).
Hasta que llegue la hora del partido, ellos aprovechan recorriendo las calles para conocer un poco más de Quito. “Venimos desde Buenos Aires, por nuestra cuenta, como todos los viajes. Es la primera vez que estamos acá y nos motiva la pasión y el sentimiento… no hay límites, horarios ni fronteras. Eso es lo que inspira Boca”, explica Sabrina, de 27 años y estudiante de abogacía.
Ellos vinieron solos, pero en el hotel en el que se hospedan se encontraron con unos 30 hinchas más del popular elenco argentino. Todos irán juntos a la localidad asignada para los visitantes.
En ese mismo lugar estarán dos seguidores de Boca, pero oriundos de Cuenca.
Fabián Mogrovejo y su amigo Jonathan Barros “hacían tiempo” cerca del estadio Atahualpa. Ambos viajaron en bus desde la capital azuaya.
“Mi papá es hincha de Boca a muerte, pero lastimosamente no pudo estar aquí… Cuando supe que iba a jugar con Independiente no pensé dos veces y compré las entradas”, asegura Mogrovejo, estudiante universitario de 24 años que es hincha del Deportivo Cuenca.
Fabián Mogrovejo y Jonathan Barros son simpatizantes de Boca. Ellos son de Cuenca. Foto: Carlos A. Rojas / EL COMERCIO
Él explica que está pendiente de los dos equipos. A Boca lo ve regularmente por la televisión o el internet. Al ‘Expreso Austral’ lo mira desde las gradas del estadio Alejandro Serrano Aguilar.
El gusto por Boca se extiende también a hinchas de clubes capitalinos.
William Ríos, hincha del Deportivo Quito, siente simpatía por el elenco ‘Xeneize’. Del conjunto de la Plaza del Teatro ha sido seguidor “de toda la vida”. El gusto por Boca empezó a finales de los años 90′, cuando el club era dirigido por Carlos Bianchi. “Fue una época dorada”, recuerda el quiteño de 40 años que asistirá al cotejo de semifinales ante Independiente del Valle.
“Deportivo Quito y Boca jugaron en la Copa Libertadores de 1965”, añade el aficionado azulgrana que este 7 de julio se puso la azul y oro.
William Ríos asistirá al partido entre Independiente del Valle y Boca Juniors. Él es hincha del Deportivo Quito. Foto: Carlos A. Rojas / EL COMERCIO