Solo cuando la situación es crítica Julio Asad deja la comodidad del banquillo y sale a dirigir. Es su hijo Leandro (asistente técnico) el encargado de las labores técnicas en cada compromiso que afrontan los orientales.
Esto se evidenció el sábado anterior frente al Cuniburo. En los últimos 25 minutos las imprecisiones de los jugadores para sentenciar el compromiso enojaron al ‘Turco’, que salió disparado del banquillo a reclamar a la plantilla que ese día venció 2-1. Habló con su hijo y dirigieron juntos el tiempo que faltaba para que se acabara el partido.
De igual manera sucede en los entrenamientos. En la práctica del martes pasado, Asad prefirió quedarse al borde del campo coordinando el ensayo, mientras que Leandro ensayaba tiros al arco y charlaba junto a Jaime Iván Kaviedes y Juan Carlos Villacrés.
Leandro Asad tiene 29 años y también se desempeñó como futbolista profesional. Se formó en las inferiores de Vélez Sarsfield y también tuvo un breve paso por la Sub 20 de Liga de Quito cuando su padre era entrenador. Jugaba de delantero y pasó por clubes de la Segunda y Tercera divisiones argentinas como Liniers, Argentino de Merlo, Deportivo Riestra y Dock Sud.
Decidió finalizar su trayectoria hace dos años y prefirió dedicarse a la dirección técnica. Su primera experiencia la vivió hace un año con Independiente del Valle. Su progenitor lo invitó a unirse al plantel tras la marcha de su asistente Álvaro Carcelén.
La experiencia le ayudó a ser el ‘hombre de confianza’ del ‘Turco’ a pesar que los ‘rayados’ no alcanzaron los resultados esperados y renunciaron en abril del 2011.
Casi un año y medio después, esta misma dupla guía con éxito al ‘Papá’ en su lucha por llegar a la Serie B. Leandro no dudó cuando su padre le pidió que regresaran a Ecuador para hacerse cargo del elenco auquista.
“Me acoplé con facilidad al grupo de jugadores porque tengo casi su misma edad. Tengo una relación amistosa con ellos. Mi papá coordina, analiza cada aspecto y es bastante serio cuando dirige”, destacó el menor de los Asad.
Esto mientras, el DT de 59 años aspira a que su hijo logre consolidarse como entrenador. “Leandro ha adquirido mucha experiencia este año y se encuentra listo para dirigir en cualquier lugar. Él me ayuda a tomar las decisiones importantes dentro del equipo”, expresó.
La campaña hasta el momento ha sido exitosa. Desde que ambos asumieron la dirección técnica en julio, el cuadro ‘oro y grana’ no ha perdido ni un solo partido.
La plantilla también se encuentra contenta con la labor de los Asad. Uno de ellos es Gustavo ‘El Potro’ Figueroa, referente del club, quien tuvo inconvenientes con el anterior entrenador (Julio Vicente Moreno).
“Ellos conocen al fútbol ecuatoriano y gracias a ello hemos tenido una temporada exitosa”, destacó el delantero.
Esperan continuar esta misma racha de éxito hoy frente al Pilahuin Tio. En caso de ganar o empatar, Julio Asad se convertiría en un caso inédito dentro del fútbol ecuatoriano. Logró dos campeonatos de la Serie A: con Olmedo en el 2000 y con Deportivo Cuenca en el 2004. También ascendió a Liga de Quito en el 2001 y podría hacerlo hoy con Aucas.
Para este cotejo se espera la presencia del delantero Jaime Iván Kaviedes, quien apuntó el pasado martes a que este sería su último partido como profesional. La fiesta auquista empezará temprano.
La ‘Caldera’ estará llena
Aucas se ha mantenido en el hermetismo durante esta semana. El cuadro ‘oro y grana’ se ha entrenado en Parcayacu desde el miércoles sin la presencia de los medios de comunicación.
El ‘Turco’ quiere evitar el nerviosismo en la plantilla y no ha dado detalles del equipo que saldrá a la cancha. Quiere que el equipo esté concentrado al máximo para la ‘final’ contra el Pilahuin Tio.
“Nos favorecen la victoria y el empate. No se nos puede escapar el ascenso”, agregó el DT argentino. Se espera un lleno absoluto, tras agotarse los 18 000 boletos.