Para la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), tan agobiada por acusaciones de corrupción, el nuevo año comienza como terminó el anterior: con nuevos reproches y la publicación de dudosos documentos.
Una nota escrita a mano por el secretario general de la FIFA, Jerome Valcke, volvió a sembrar sospechas sobre el ente rector del fútbol mundial, foco de diversos escándalos por corrupción. El documento publicado hoy por el diario alemán “Süddeutsche Zeitung” parece demostrar un acuerdo secreto sobre los lucrativos derechos de emisión de los Mundiales 2010 y 2014 entre el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, y el entonces vicepresidente Jack Warner.
En la nota, Valcke comunica a Warner: “Jack, aquí está el acuerdo firmado por P. El negocio no pasó por los gremios y comisiones usuales. Por eso te pido que por el momento no lo hagas público”. “P.” es la abreviatura que suele usarse en la FIFA para “presidente”. El triniteño Warner aseguró recientemente que obtuvo derechos de emisión en su país de los Mundiales de 2002, 2006, 2010 y 2014 a un precio ridículo a cambio de apoyar a Blatter en diversas elecciones.
La FIFA negó estas acusaciones. Ante el documento publicado hoy, el organismo confirmó su autenticidad, pero consideró su interpretación “absurda y carente de fundamento”. “La nota parece auténtica. La pregunta es: ¿De qué acuerdo se trata? ¿Cuál es el contexto?”, citó el diario a la FIFA.
Según las fuentes, Blatter puede firmar acuerdos y presentarlos luego a los gremios correspondientes. “Si se pide a Jack Warner que no lo dé a conocer es solo para poder informar antes a los correspondientes gremios”, aseguró la federación internacional.
El juego de acusaciones y desmentidos en que se enzarzan el ex vicepresidente y el organismo fuerza cada vez más a la FIFA a dar una explicación. “Tiene que apoyar sus afirmaciones con pruebas. La FIFA no debe demostrar nada”, se defienden no obstante en la organización con sede en Zúrich. Tras su retirada, Warner profetizó un “tsunami en el fútbol” contra Blatter.
El penalista suizo Mark Pieth, jefe del comité de buen gobierno de la FIFA, cuenta con nuevas revelaciones sobre corrupción durante el proceso de reformas del organismo rector del fútbol mundial. “Me sorprendería que todo discurriera sin escándalos”, dijo Pieth en una entrevista que publica hoy el diario alemán “Frankfurter Allgemeine Zeitung” (FAZ).
El recién creado comité de buen gobierno de la FIFA se ha puesto como objetivo conseguir una dirección de la federación más transparente y responsable. Según Pieth, el tiempo apremia. Pero ya “se aprecia cierta resistencia aquí o allá del aparato del poder”, aseguró. “Debemos procurar que los gangsters no se escabullan escondidos tras los que critican las reformas”.
Pieth criticó con dureza a personas y a estructuras de la FIFA, que el año pasado vivió la peor crisis de su historia tras numerosas acusaciones de corrupción. “No diría que la FIFA sea corrupta. Pero hay demasiadas personas corruptas en esta estructura”, dijo Pieth a “FAZ” subrayando: “Soy muy consciente de que la gente en la dirección de la FIFA que, además de su función, hizo negocios privados, es un enorme problema”. Blatter “nos es relativamente indiferente”, añadió el jurista suizo. “No aparece realmente en nuestros trabajo”, dijo Pieth, que anunció “en parte duras” propuestas para la próxima sesión del comité ejecutivo en marzo.