Los jugadores del Chacarita llegan a una cancha de césped del barrio San Carlos, al norte de Quito, y se cambian en los graderíos o en un costado del campo. Los futbolistas de este equipo de la Segunda categoría de Pichincha tienen uniformes para entrenarse, pero no tienen camerinos o lugares propios para ensayar. Solo cuatro jugadores reciben sueldo mensual.
El técnico Polo García, quien ha conseguido recursos para los refrigerios y las vestimentas, pidió ayuda a sus amigos y los convenció de que invirtieran. Así, consiguió que tres conocidos cancelaran los sueldos de Paúl Guevara, Pablo Amaya y Joe Cifuentes.
Guevara, por ejemplo, recibe USD 500 mensuales de un inversionista. El resto de la plantilla tiene un premio por partido.
García planea recuperar el dinero y pagar a sus amigos con el monto que obtendría de la taquilla del partido ante Aucas, previsto para julio de este año.
Esa era la realidad (hasta el viernes pasado) del Chacarita, equipo que formó una alianza con los chullas, en el 2008. El plantel tiene apuros, pese a que ha federado a jugadores como Dixon Arroyo y Marcos Nazareno, quienes hoy integran la plantilla del Quito.
La paradoja es que Arroyo y Nazareno jamás jugaron en el Chacarita. García y el actual coordinador y ex DT, Jorge Villarroel, admiten que no los conocían antes.
Este hecho ha ocurrido en el balompié del país. Los registros de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) revelan, incluso, que jugadores han sido inscritos tan solo un día en planteles de Segunda categoría (ver recuadros).
Esto precisamente ocurrió con Arroyo, seleccionado ecuatoriano Sub 20, quien clasificó al Mundial de Colombia en febrero de este año, en Perú.
Su ficha en la FEF muestra que fue inscrito por el Chacarita el 7 de septiembre del 2009. Esto duró poco porque al día siguiente pasó a los registros del Quito, donde estuvo hasta el 31 de diciembre del 2010.
Desde el 1 de enero del 2011 hasta el pasado 14 de febrero estuvo nuevamente inscrito en el Chacarita. Sin embargo, desde el 15, dos días después que obtuvo la clasificación al Mundial Sub 20, volvió a los registros chullas.
Pero Arroyo también muestra otras inscripciones. Desde el 24 de marzo hasta el 5 de septiembre del 2009 estuvo en el Norte América. Sin embargo, nunca jugó en ese plantel.
Los futbolistas pueden estar inscritos en un club y actuar en otro. Sin embargo, para que esto ocurra, deben tener un contrato vigente con el plantel que los transfiere, explica el abogado Emilio Valencia, presidente de la Asociación de Futbolistas del Ecuador
De lo contrario, existiría una infracción al reglamento y el club podría ser sancionado, agrega.
Guillermo Saltos Guale, asesor jurídico de la FEF, aclara: “El reglamento prohíbe a los clubes prestar sus nombres para preservar intereses económicos de terceros”. Saltos Guale no afirmó que cuadros como el Chacarita o Norte América hayan incurrido en esta irregularidad. Para eso, explicó, debe analizar los casos de cada uno de los jugadores.
AFNA tiene a una persona como directivo de dos clubes
Chacarita consiguió la clasificación a la Segunda en el 2007. Luego, Villarroel acordó una alianza con el Quito, entonces presidido por Fernando Herrera.
El convenio consistía en que los futbolistas sin oportunidades en la ‘AKD’ deberían actuar en el Chacarita, en el 2008. El relacionista público chulla de ese entonces, Esteban Pacheco, informó ese convenio: “(…) Chacarita de Sangolquí, desde hoy en adelante se constituirá como filial deportiva de Sociedad Deportivo Quito”.
En el 2009, se reestructuró el pacto y Villarroel logró un acuerdo con Azulgrana, empresa que se había constituido para dar un soporte económico al Quito.
Azulgrana se convirtió en administrador del Chacarita y puso de presidente a Wilson Saldarriaga.
Esto consta en un comunicado del Chacarita dirigido a la FEF y proporcionado a este Diario por la Asociación de Fútbol no Amateur de Pichincha. En el documento del 8 de julio del 2009 se informa que Saldarriaga es el titular para el período 2009-2013.
Villarroel y García confirmaron que el trato se cumplió hasta el 2010. Los chullas invirtieron USD 50 000 en el Chacarita.
Sin embargo, este año, el cuadro sangolquileño ha tenido apuros y, como se detalló al inicio, García ha buscado recursos por su lado.
En estos dos últimos años, se registraron a jugadores como Arroyo y Nazareno en el Chacarita. “Nosotros no hemos estado ahí, pero pertenecemos allá”, dijo Nazareno, en la práctica del Quito, el viernes pasado, en Carcelén.
Saldarriaga no respondió a estas inquietudes. Él figura en AFNA como Presidente de Chacarita, pero también como Vicepresidente del Quito. Este Diario llamó al móvil del directivo cinco veces, pero no obtuvo respuesta. El relacionista público chulla, Byron Pástor, dijo a LUNES DEPORTIVO que Saldarriaga no nos concederá una entrevista.
Los reglamentos de la FEF prohíben que una persona sea dirigente en dos planteles, explica Valencia. Pero, según Villarroel, el Presidente de Chacarita en el 2010 fue Jorge Ojeda y se tiene previsto elegir a otro. Eso sí, admite que no actualizaron los papeles de la nueva directiva en la FEF.
Hasta el viernes pasado, Villarroel confirmó que mantenía conversaciones con el Quito para retomar el acuerdo firmado en el 2009. La intención era que Azulgrana siga aportando.
Los casos del Norte América y Deportivo del Valle
El Norte América de la Segunda categoría de Guayaquil le pertenece a Marco Zambrano. Él lo adquirió después de salir de Barcelona (donde fue Gerente deportivo) e, inmediatamente, estableció una alianza para abastecedor de jugadores al Independiente José Terán.
En el club practican 250 menores, de 10 años en adelante, de distintas provincias. Cuenta con un complejo en la vía a la Costa, donde hay dos canchas y una residencia para 100 niños. Ellos reciben educación, alimentación, medicinas, atención médica y tratamiento psicológico.
Zambrano es el principal brazo financiero del club presidido por Álex Anchundia Peláez. No consta como directivo de ese plantel y tiene el carné de agente FIFA. Él, según reconoció, pagó cerca de USD 7 000 a Rocafuerte para que este club liberara a Dixon Arroyo, en el 2008.
En el artículo 6 del reglamento de los agentes de jugadores de la FIFA dice: “Un aspirante (a agente) no podrá, bajo ninguna circunstancia, ocupar un puesto de funcionario, oficial, empleado, entre otros, en la FIFA, en confederación, una asociación, una liga, un club o cualquier organización relacionada con estas organizaciones”.
En el equipo financiado por Zambrano también se han registrado a jugadores por poco tiempo como el caso de Arroyo.
Por ejemplo, Freddy Araujo estuvo desde el 31 de marzo del 2009. Luego, el 11 de agosto de ese año pasó al Independiente, pero regresó al Norte América el 11 de mayo del año pasado. Dos días después fue inscrito nuevamente por el Independiente.
Gabriel Cortez Casierra y Mario Pineida fueron también inscritos momentáneamente. El primero fue registrado el 14 de septiembre del 2009 y, un día después, por el Independiente.
El segundo estuvo en el equipo guayaquileño desde el 7 de abril hasta el 10 de mayo del 2009. El 12 de ese mes fue registrado por el Panamá hasta el 31 de diciembre del 2009. Luego, el 2 de febrero del año pasado, pasó al Independiente pichinchano.
Diego Herrera, agente FIFA y representante de Antonio Valencia, dice que jamás había conocido de jugadores inscritos en clubes solo por un día.
Herrera solo recuerda el caso de Segundo Castillo, quien fue inscrito en el Deportivo del Valle, de la Segunda categoría de Portoviejo. El mediocampista nunca jugó en el club manabita.
Castillo fue inscrito en el cuadro manabita el 31 de agosto del 2008. Luego, fue transferido al Estrella Roja de Serbia. También registra otra inscripción en el Valle del 11 septiembre al 31 de agosto del 2009. Luego, fue registrado en el Quito, su actual club.
Emilio Valencia advierte que Castillo debería tener un contrato con Deportivo del Valle. De lo contrario, habría una infracción.
Walter Farfán, actual DT del Deportivo del Valle, dijo a este Diario que Castillo jamás ha jugado en el club.