El centrocampista del Barcelona Cesc Fábregas reconoció hoy las dificultades que pasó su equipo para eliminar al Real Madrid en los cuartos de final de la Copa del rey, aunque estimó que su equipo sale “reforzadísimo” de la cita.
“El Real Madrid es, sin lugar a dudas, el rival más temible del mundo. Lo raro sería que no se sufriera contra el Madrid. Históricamente, en este club, en partidos ajustados como el de anoche, ‘palmábamos’ (caíamos) en el último minuto y ahora no es así”, explicó en rueda de prensa.
Por eso, el jugador catalán reivindicó el papel de su equipo contra los blancos, ante los que ganaron 2-1 en Madrid y empataron 2-2 en casa: “La eliminatoria no es solo el partido de ayer. Son 180 minutos, hay que ir al Bernabéu y ganar, y luego jugar en el Camp Nou. Hemos sabido sufrir, hemos eliminado al Madrid, que no es fácil, y salimos reforzadísimos de todo esto”. Sin embargo, el Barcelona tuvo que pagar un coste alto al perder por lesión a Alexis Sánchez y Andrés Iniesta.
Cesc recordó que, como Iniesta, la temporada pasada sufrió un calvario con las lesiones musculares y sabe perfectamente por lo que está pasando su compañero. “Él sabe que lo estamos esperando, porque lo necesitamos. Que se recupere bien, porque es junto a Leo (Messi) el jugador más desequilibrante del mundo”, comentó.
Pese a todo, el centrocampista azulgrana aseguró que el equipo ha demostrado que “puede con todo” y que las bajas no condicionarán su rendimiento las próximas semanas. “Estamos con confianza, con muchas ganas y ahora lo que hay que hacer es sacar lo mejor de nosotros mismos y tirar para adelante. Somos el Barcelona y no puede haber excusas de ningún tipo”, destacó.
Por lo que respecta a su situación personal, Fábregas reconoció haber perdido la gran condición expuesta en el arranque de temporada y admitió que en el clásico no hizo su mejor partido. “Ahora parece que, si no marco un gol, juego mal, y tampoco creo que se haya de juzgar mi fútbol por eso, porque nunca he sido un goleador. Está claro que yo tampoco estoy contento del partido que hice ayer. Solo llevo seis meses aquí y sé que tengo que seguir aprendiendo y que me queda mucho que mejorar”, manifestó.
Por último, Fábregas disculpó al madridista Pepe, que durante el encuentro del miércoles protagonizó una nueva acción polémica al golpear con el brazo en la cara del catalán. “Creo que fue casualidad que fuera él y que fue una jugada involuntaria. Es un futbolista que siempre juega mucho con el cuerpo y al proteger la posición mueve un poco los brazos y me toca en la cara, pero nada más”, concluyó.