La selección boliviana de fútbol partió hoy a Buenos Aires para enfrentar el viernes a Argentina con la difícil misión de rescatar al menos su primer punto en la eliminatoria del Mundial 2014.
Según los anuncios previos, el técnico Gustavo Quinteros mantendrá el mismo esquema táctico predominantemente defensivo con el que igualó 1-1 con el mismo rival en la apertura de la última copa América.
Al cabo de 14 partidos jugados hasta ahora, incluyendo los dos de la primera fecha eliminatoria, el equipo que dirige Quinteros no consiguió ningún triunfo. Su actuación más destacada fue justamente ante Argentina.
Bolivia perdió 4-2 en Montevideo ante Uruguay y 1-2 ante Colombia en La Paz. El técnico aspira ahora a conseguir algún punto en la tercera fecha. “Si entramos enchufados, podemos conseguir otro buen resultado” , manifestó.
Aunque Quinteros alineó en la víspera en la última práctica el posible equipo titular, su única duda está en la presencia del único atacante, pues Marcelo Martins, titular habitual, llegó recién anoche a Santa Cruz para viajar hoy.
Los medios locales consideran que Quinteros podría reservar a Martins para el partido del miércoles ante Venezuela, en Puerto Ordaz, y que ante Argentina empleará a Augusto Andaveris, atacante de Aurora.
En el equipo boliviano para el viernes estará Luís Méndez, como devensor central, en lugar del capitan Ronald Raldes, que está suspendido por haber acumulado dos tarjetas amarillas, ante Uruguay y Colombia.
Con esas variantes, la probable alineación para el viernes será la siguiente: Carlos Arias. Christian Vargas, Ronald Rivero, Luis Méndez y Luis Gutiérrez. Wálter Flores, Jaime Robles, Edivaldo Rojas, Ruddy Cardozo. Pablo Escobar y Augusto Andaveris.
El equipo boliviano se concentrará en la sede del Buenos Aires Football, de Matías Almeyda, donde Bolivia ya estuvo para la Copa América que se disputó a mediados de este año.
El equipo tiene programada para esta noche una labor regenerativa en la cancha de su alojamiento. Quinteros quiere aprovechar el miércoles y jueves para afinar todos los detalles, sobre todo defensivos.