El ‘Bolillo’ convirtió a la Tri en una familia

El  ‘Bolillo’  convirtió a la Tri en  una familia

El ‘Bolillo’ convirtió a la Tri en una familia

En los entrenamientos, en las concentraciones y en los partidos, los seleccionados que se clasificaron al Mundial de Corea-Japón 2002 aprendieron a compartir como si fueran familiares.

Esa costumbre fue inculcada por el técnico colombiano Hernán Gómez, quien guió la clasificación de Ecuador a su primer Mundial de fútbol luego de 41 años de intentos fallidos.

El ‘Bolillo’, como era apodado el DT, revolucionó la forma de trabajar en la intimidad de una Selección nacional para lograr el propósito de jugar en una cita mundialista. Lo cuentan ex jugadores y colaboradores de ese equipo que incluyó a futbolistas experimentados como Álex Aguinaga, Ulises de la Cruz e Iván Hurtado.

Milton Rodríguez, ex preparador de arqueros de Gómez, recordó las claves de ese proceso. “El ‘Bolillo’ nos enseñó que teníamos que formar una familia para conseguir cosas grandes. No había individualidades sobresalientes, pero sí un grupo que se respaldaba”.

Gómez inició su proceso en Ecuador en 1999 y dirigió en el Mundial del 2002. El DT llamó a decenas de jugadores bajo su mando, pero contó con una base habitual de 13 futbolistas. Entre ellos se destacaron Aguinaga, el futbolista que más partidos disputó (55) en el camino al Mundial (Copa América y eliminatorias). Iván Hurtado completó 51; Ulises de la Cruz, 31, Cléber Chalá, 29; y Agustín El ‘Tin’ Delgado, 28.

El trabajo colectivo suplió la ausencia de figuras como ocurre ahora, insistió Rodríguez. En efecto, en esa época, Gómez contó con pocos jugadores que mantuvieron regularidad en clubes fuera del país. Así, en ese proceso solo se cuenta Aguinaga (Necaxa de México), De la Cruz (Hibernian de Escocia) y Delgado (con poco suceso en el Southampton de Inglaterra).

Esto contrasta con la Tri de ahora, dirigida por Reinaldo Rueda y que tiene figuras como Antonio Valencia y ocho seleccionados que mantienen regularidad en el fútbol mexicano (ver nota de la Selección actual).

Juan Carlos Burbano, otro ex integrante en el proceso de Gómez, recalca que el trabajo grupal sirvió para convertir a la Selección en un equipo fuerte. Él cuenta algunos detalles: si un jugador fallaba en la entrega del balón no existían recriminaciones y sus compañeros lo motivaban.

“Hacíamos algo parecido a lo que ocurrió tras el autogol de Juan Carlos Paredes en el partido ante Chile, el viernes en el Atahualpa. En vez de recriminar al jugador por su error lo ayudábamos para que se levantara”.

Uno de los aciertos eran los códigos impuestos en la concentración de la Escuela Superior Militar, en Parcayacu. Estos tenían que ver, por ejemplo, con el horario limitado para ver televisión en las habitaciones y el comportamiento en el comedor de los integrantes del plantel tricolor.

Las normas impuestas y el estilo de juego de Gómez dieron resultados y el equipo logró animar a los aficionados para que crearan el coro “Sí se puede”.

¿Existía liderazgo en ese equipo? Rodríguez y Burbano muestran leves diferencias. El primero afirma que todos los jugadores ejercían liderazgo y trataban de apoyar a sus compañeros. “El guía general era el ‘Bolillo’, un motivador innato. Pero entre los jugadores todos se veían como familiares, empezando por los experimentados como ‘Bam Bam’ Hurtado o Aguinaga.

En cambio, Burbano dice que en todas las líneas del equipo había jugadores con experiencia y que podían aconsejar al resto de sus compañeros. “Por ejemplo, en el medio campo cuando salía Alfonso Obregón se tenía a Marlon Ayoví, Edwin Tenorio y, más adelante, a Édison Méndez”.

Aguinaga, en cambio, resalta la figura de ‘Bolillo’ Gómez, de quien considera aprendió cómo manejar el aspecto emocional de los jugadores. “El ‘Bolillo’ sabía cómo hablarnos. Era una persona muy alegre”. Él recuerda que antes del partido ante Uruguay, en el que Ecuador se clasificó al Mundial del 2002, el DT colombiano les dijo: “Están cagaditos”.

Esta forma de dirigir de Gómez dio resultados y Ecuador se clasificó a su primer Mundial con una campaña inédita: culminó en el segundo lugar de las eliminatorias detrás de Argentina y con 31 puntos.

Por esto, Burbano refiere que la Selección que jugó el Mundial del 2002 es histórica y una de las mejores en la última década en Ecuador.

Suplementos digitales