El Barcelona no necesitó hoy de la ayuda salvadora de Lionel Messi o Andrés Iniesta para golear por 3-0 al Zaragoza y dar un paso más hacia el título de la Liga española de fútbol. El equipo azulgrana, que prescindió de varias estrellas en la jornada 31 del campeonato, sumó un nuevo triunfo en su camino practicamente indiscutido hacia la coronación.
Cuando le quedan 21 puntos por disputar, el equipo dirigido por Tito Vilanova le saca ya 16 unidades al Atlético de Madrid y al Real Madrid, que jugará más tarde ante el Athletic de Bilbao.
Como si fuera poco, el equipo catalán sumó once goles en los últimos cuatro encuentros y finalizó tres de los últimos cinco encuentros de liga sin recibir goles. El presente del Zaragoza es diametralmente opuesto: suma 14 partidos al hilo sin ganar, perdió tres de los últimos cuatro partidos y fue incapaz de escaparse de la zona de descenso de descenso.
Ya desde el planteo previo, el Barcelona asumió el encuentro como una oportunidad especial para dar descanso a varias de sus figuras. Las ausencias de Messi, Iniesta, Sergio Busquets y Jordi Alba sugerían una responsabilidad importante para aquellos integrantes del “ejército de reserva” azulgrana.
Con la misión bien aprendida, el Barcelona encontró las herramientas para encaminar la victoria en los primeros minutos. Cristian Tello entendió que la banda izquierda era la autopista perfecta para hacer daño en el área rival y luego se consolidaría como la gran pesadilla de los dueños de casa.
La apertura del marcador se dio mediante una contra bien comandada y finalizada por Thiago Aclántara. El mediocampista tuvo la paciencia suficiente para que sus compañeros se armaran por las bandas y protagonizó una buena pared con Alexis Sánchez para definir junto a un palo con un tiro cruzado a los 20 minutos. Poco antes del descanso hubo tiempo para que Tello empezara a consolidarse como el mayor peligro ofensivo del Barcelona.
El delantero recibió un pase mágico de Thiago y engañó al portero Roberto para definir con firmeza al palo más cercano. Ya en la segunda mitad, el Zaragoza demostró no tener herramientas algunas para poder siquiera arañar la proeza y el Barcelona entendió que con control de la pelota y sin exigir el físico al máximo podría coronar una victoria sólida y sin lesiones de cara a las semifinales de la Liga de Campeones.
Alexis Sánchez envió una vaselina exquisita al travesaño, mientras que poco después Tello anotó el tercer tanto de los visitantes después de dejar en el camino a Glenn Loovens y definir con lo justo junto a un palo.
Ya en la última media hora y con el resultado sentenciado, las únicas emociones en las gradas de La Romareda se vivieron en las ovaciones en el ingreso de dos jugadores del Barcelona: Eric Abidal, quien se encuentra en pleno retorno tras haber sido trasplantado del hígado, y David Villa, ex jugador del equipo aragonés.
Antes, el Atlético de Madrid goleó por 5-0 al Granada y alcanzó la línea de su vecino Real Madrid y la Real Sociedad se consolidó entre los clasificados a la Champions gracias a un triunfo por 2-0 contra el Rayo Vallecano.