‘Hasta el fin del mundo y más allá”. Esa es nueva consigna de Armagedón, una de las barras más representativas del Aucas. Y así lo demostró ayer, en el partido del ‘Ídolo del Pueblo’ vs. Chile, de Uyumbicho, por la séptima fecha del torneo de Segunda categoría de Pichincha.
100 integrantes de la barra y otros 2700 hinchas acudieron al estadio El Chan, de Machachi, para observar el partido. Al escenario llegaron niños, jóvenes, adultos y, sobre todo, seguidores de la tercera edad auquistas, que con sus matracas, pitos y cánticos hicieron vibrar los graderíos.“No importa dónde juegue mi Aucas. Lo voy a seguir a cualquier estadio”, dijo Luis Guamote, que arribó al estadio vistiendo una camiseta amarilla y una gorra gris con el distintivo de su equipo.
Para asistir al partido de ayer, Guamote, de 55 años, se levantó más temprano para festejar a su esposa, por el Día de la Madre. Después, se dirigió con sus amigos al estadio para comprar las entradas. Hasta ese momento todo iba bien. Pero el panorama varió cuando les dijeron que debían pagar USD 5 por cada boleto.
“Esto es un abuso. Ningún partido de Segunda tiene ese valor”, admitió el hombre de 55 años.
Ese malestar también se reflejó en otros hinchas. Sobre todo, en aquellos que llegaban desde Quito. “Creo que están aprovechándose de la hinchada. Los cotejos en el estadio del sur cuestan USD 3”, recordó Mateo Bonilla.
Pese al alza del valor e n los boletos, los hinchas finalmente pagaron su entrada y disfrutaron del encuentro, en el que Aucas se impuso 2-1 al club de Uyumbicho.
Aucas se ha convertido en un inyector económico de este torneo. Al equipo de fútbol lo siguen más de 2 000 personas a los diferentes cantones de Pichincha.
En el partido de ayer, el club oriental mostró solidez y orden en cada una de sus líneas. Mientras que los defensores de Chile fallaron en la marca y sus volantes, en la distribución del esférico.
Precisamente de esas falencias se aprovechó Aucas para anotar los dos tantos. El primero lo hizo Lenin Ibujés, al minuto 24, mientras que el segundo lo convirtió Daniel Maldonado, tras cobrar un dudoso penal, sancionado por el árbitro Juan Albarracín.
En ese partido, Ibujés, ex jugador de Liga de Quito, fue la figura más desequilibrante y peligrosa.
Chile, en cambio, propuso un juego basado en el contragolpe. Fue así como Fabián Paredes anotó a los 55 minutos, en el área resguardada por Héctor Carabalí.
Antes, el centro delantero intentó sorprender al experimentado golero auquista, pero sus defensas se lo impidieron. El líbero Carlos Vayas fue el encargado de ordenar a sus compañeros. “Vamos muchachos, marquen”, gritaba.
Al final del encuentro, los hinchas orientales aplaudieron el rendimiento de los jugadores y del técnico Dragan Miranovic.