Entrevista a Walter Guerrero, preparador de arqueros de Barcelona
La semana pasada, el ex arquero paraguayo José Luis Chilavert dijo que el fútbol mundial atraviesa por una crisis de buenos arqueros. ¿Qué tan cierta es esa afirmación?
No coincido con (José Luis) Chilavert. El alemán Manuel Neuer (arquero del Schalke 04) ha sido una de las revelaciones del fútbol mundial. Y sin irnos tan lejos, en Sudamérica está el brasileño Roggiero Ceni, el chileno Claudio Bravo, el uruguayo Fernando Muslera. Ellos son arqueros de jerarquía que están construyendo una carrera llena de éxitos.
Pero ellos no proyectan el liderazgo que en su momento fue característico en René Higuita, Farid Mondragón, Iván Ramiro Córdova y el mismo José Francisco Cevallos…
Las comparaciones en el fútbol, como en la vida, tienen un margen de error. El liderazgo, en el fútbol actual, se mide a partir de la personalidad del individuo, los objetivos y las metas que se traza, cómo se identifica con el grupo y cómo maneja el equipo desde su posición.Ceni, Bravo y Muslera son líderes y profesionales natos.
¿Pero no cree que los guardametas que ganan partidos se están extinguiendo?
El fútbol actual no se sustenta en actuaciones individuales sino en colectivas. Eso no quiere decir que el talento de un jugador no es importante en un equipo, por el contrario, es determinante. Pero siempre será mejor tener muchos talentos dentro de un grupo.
Cuando nos referíamos a los arqueros que ganan partidos, estábamos hablando de quienes saben manejar resultados a favor.
Esa virtud se gana con experiencia, con situaciones de juego y con minutos en cancha. La jerarquía y lo que se conoce como ‘mañas’ son fundamentales para alcanzar esa cualidad. Pero no hay que desentenderse del entorno en el que se han desenvuelto esos arqueros que han logrado ser determinantes en un partido.
¿A qué se refiere?
A que hay que fijarse en el momento por el que atraviesa el club en el que juega ese arquero. La motivación del resto de jugadores importa y mucho. Incluso hay que tomar en cuenta por qué objetivos se juega.
¿Eso quiere decir que la cercanía de la Copa América y de las eliminatorias mundialistas puede motivar a nuestros arqueros para que busquen ser convocados a la Selección Nacional?
Claro que sí. Eso genera una competencia sana. En el fútbol ecuatoriano están surgiendo buenos arqueros que con un poco más de experiencia van a mejorar su nivel considerablemente. Creo que esta va a ser la oportunidad para que Walter Chávez, John Jaramillo y Johan Padilla.
¿La inexperiencia de nuestros arqueros podría hacer pensar que nos vamos a enfrentar a una transición prolongada, más aún después del retiro de José Francisco Cevallos?
No sé si prolongada, pero vamos a pasar por una brecha considerable. Marcelo Elizaga tiene 39 años. Máximo Banguera es uno de los mejores del país y tiene aún tiempo para mejorar. Lo mismo ocurre con Alexander Domínguez. Ellos son los candidatos para ir a la Copa América, pero creo que en la lista falta Xavier Klimowizc.
¿No es preocupante que dos de los cuatro arqueros que acaba de mencionar sean nacionalizados?
Lo es, pero tampoco hay que negarles la oportunidad de tapar. Más aún si están en buen nivel. Pero hay que analizar ese hecho desde una perspectiva positiva. Son nacionalizados, pero tienen una infinidad de experiencias que compartir con los arqueros que recién se están formando.
Solo 10 arqueros ecuatorianos, entre ellos el nacionalizado Marcelo Capirossi, han jugado en equipos del exterior. ¿Por qué no exportamos guardametas?
Porque los clubes extranjeros buscan más el mercado argentino y brasileños. Los arqueros ecuatorianos no interesan afuera. Pero hay que abrir las puertas tal como lo hicieron jugadores en otra posición. Lo que hizo Álex Aguinaga en México, por ejemplo, hizo que el fútbol ecuatoriano se vea más en ese país.
¿Puede un arquero joven convertirse en líder de un equipo o de una Selección?
Sin lugar a dudas, pero le cuesta mucho porque el liderazgo está relacionado con la experiencia.
¿Quiere decir que solo los guardametas veteranos pueden tener liderazgo en la cancha?
La edad no tiene mucho que ver. Un arquero puede haberse enfrentado a un sinnúmero de situaciones de juego antes de los 30 años. Todo depende de las oportunidades que tengan para sumar minutos en la cancha.
¿Cuánto pasará para que el fútbol ecuatoriano tenga a un arquero como José Francisco Cevallos?
No lo sé. Dependerá de las confianza que los estrategas les brinden a los nuevos elementos y del entorno que se cree alrededor de ellos. Los mundiales Sub 17 y Sub 20 que jugará Ecuador este año serán un buen termómetro para conocer cuáles son su proyecciones profesionales.
¿Se puede saber eso en torneos que duran apenas un mes?
No, pero pueden ser un indicador de cómo y con quiénes se debe trabajar de ahí en adelante. Los mundiales serán parte de esa experiencia que debe seguir adquiriendo.
HOJA DE VIDA
Walter Guerrero
Fue arquero de Barcelona en la década de los ochenta. Jugó además en Técnico Universitario y Liga de Quito. Es preparador de los guardametas canarios.
Su única experiencia en el exterior fue en 1996. Jugó un año en el club Hyundai Tigers de Corea del Sur.
En 1985, Carlos Morales le quitó la titularidad. Guerrero fingió una lesión para permitirle tapar.