En silencio, sin que siquiera los empleados del aeroparque metropolitano Jorge Newbery se enteraran, la selección brasileña de fútbol llegó esta noche a Buenos Aires para ultimar su preparación para la Copa América que comenzará el viernes 1 de julio en la Argentina.
El plantel brasileño, campeón de las últimas dos ediciones del torneo continental, arribó en medio de la indiferencia del público argentino. Nadie en el aeropuerto pareció enterarse de que los pentacampeones del mundo arribarían en un vuelo de línea de la compañía TAM.
Sólo un puñado de periodistas brasileños y algunos hinchas del club San Pablo esperaba la llegada del seleccionado de su país. De todas maneras, el paso de los futbolistas por la terminal aérea de la Ciudad de Buenos Aires fue tan fugaz que tampoco se dejaron ver.
Un ómnibus esperó al seleccionado a un costado de la pista y desde allí lo trasladó hacia el hotel Sofitel La Reserva Los Cardales, ubicado a 60 kilómetros de la capital argentina, donde los brasileños tendrán su concentración y su campo de entrenamiento durante la Copa América.
La selección brasileña, que defenderá los títulos ganados en Perú 2004 y Venezuela 2007, hará este miércoles por la mañana su primera práctica en tierras argentinas y pasado el mediodía ofrecerá una conferencia de prensa.
En el último parte médico entregado por la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), esta tarde desde Río de Janeiro, minutos antes de partir hacia la Argentina, se consigna la mejoría física de Alexandre Pato, ya recuperado de una luxación de hombro. “Los jugadores pasan el examen con 10”, detalló la Web de la CBF.