El árbitro Fabián Muñoz, quien fue agredido el sábado pasado en el estadio 26 de Enero, anunció que demandará a la dirigencia del Municipal de Cañar. Él aseguró que entre sus agresores identificó a directivos de ese club.Los incidentes se registraron al final del cotejo, tras la derrota (0-1) de los locales ante la Universidad Técnica de Cotopaxi. Muñoz, al minuto nueve, pitó un penal que luego se concretó en gol por Paúl Guevara. En la segunda etapa expulsó a Marco Rodríguez, tras la acumulación de dos tarjetas amarillas. Eso provocó que al final unos 30 hinchas ingresaran a la cancha para agredir a Muñoz y a sus asistentes. Una docena de policías dispersó a los agresores con el uso de gas lacrimógeno.Según Oswaldo Crespo, presidente del Cañar, el árbitro está en su derecho de asumir cualquier defensa. “La dirigencia tiene sus pruebas de descargo”. Rechazó el informe de Muñoz, en donde consta que Crespo lo amenazó. “Es totalmente falso. Solo me acerqué a reclamarle su actuación”.Muñoz, sin dar nombres de dirigentes, contó que antes de ser agredidos fueron amenazados. “Nos dijeron que no vamos a salir vivos del estadio”. Los árbitros agredidos tienen el apoyo de todos sus colegas.El estadio Municipal 26 de enero podría ser sancionado con una suspensión.