No son la gran mayoría, pero los hinchas del Deportivo Quito demuestran que en la pobreza se sabe querer.
Otra vez, el apoyo de la afición chulla fue conmovedor en un equipo donde los rumores y las penurias económicas acompañan y empañan a las alegrías futbolísticas.
El pospartido del importante triunfo del sábado ante Universidad Católica (2-0), en el Atahualpa, era el momento ideal para hablar del gran funcionamiento táctico que tiene el equipo del DT Rubén Darío Insúa.
Era un tiempo idóneo para elogiar el ‘poema’ de gol que hizo el ariete argentino Federico Nieto (su tanto 23 en el torneo) por el concepto de fútbol colectivo que se mostró en la jugada.
Había el espacio suficiente para conversar, analizar, comentar o decir que el ‘Colorado’, Luis Congo, será padre en los próximos días y que ya está recuperado de su lesión. Así lo demostró en el juego y anunció su paternidad en el festejo del segundo gol ante la ‘Chatoleí’.
Sin embargo, no hubo mucho espacio mediático para tocar estos temas porque otra vez a la salida del Atahualpa el tema de conversación fue el tema de las platas.
Por un lado, la versión de los jugadores fue que no concentraban porque sus finanzas aún no andan bien y todavía hay deudas y que los acreedores siguen golpeando las puertas de sus domicilios por cobrar las deudas.
Y por el otro lado, Fernando Mantilla, el presidente, al bajar al camerino a felicitar al equipo contaba que el equipo no concentró por una especie de cábala que le hace bien al grupo.
Entonces había que preguntarle a Insúa qué mismo pasaba. El estratega, que lució una camisa color ladrillo y que ha insistido que no es por cábala, respondió que eso era para tratarlo en la interna del grupo y dijo que el plantel confía en la gestión de Mantilla.
Insúa elogió a sus pupilos por lo hecho en la cancha y también le dio un espacio de reconocimiento a unos 4 000 hinchas que apoyaron al equipo y terminaron despidiendo con generosos aplausos a los jugadores. Incluso despidieron con cánticos a Colón a pesar que no fue su gran partido y cometió equivocaciones en el compromiso.
Colón tuvo tres contragolpes que no terminaron en goles. Se equivocó en la habilitación y estuvo lento para definir frente al arco de Hernán Galindez, de Católica.
Fue un partido complicado para el Quito porque al frente tuvo un equipo bien aplomado y que le hizo pasar apuros en la primera media hora de juego. Los hermanos Patta, Henry y Elvis, hicieron pasar sustos a la zaga chulla. Diego Benítez hizo un par de jugadas, pero que no terminaron en gol.
El puñado de hinchas de la Católica que se ubicó en la tribuna del estadio se ilusionó porque el equipo demostró que estaba para ganar al cuadro local con fútbol. Pero Insúa tuvo el mérito de leer las deficiencias del equipo de Jorge Célico y las debilidades, especialmente en defensa.
El equipo ‘Camaratta’ no mostró esa imagen de solvencia de las primeras cinco fechas. La Católica manejó la pelota, tuvo el dominio, pero el Quito fue superior a la hora de definir. Los gritos desesperados de Federico Laurito no fueron suficientes para inyectar confianza y optimismo durante el cotejo.
En el segundo tiempo, Católica sí tuvo oportunidades de empatar, pero le faltó hasta algo de suerte. Dos cabezazos de Laurito pudieron ser goles, pero el argentino y en general la mayor parte del equipo no estuvo con la suerte a su favor.
Hay puntos destacables en el equipo de Célico. Por ejemplo, la tarea que cumple Pablo Palacios como improvisado volante de marca y de creación a pesar que fue formado para otro puesto.
También fue destacable la participación de Ridder Alcívar. El zaguero jugó bien, pero fue reemplazado porque Célico decidió arriesgar y terminó jugando con Facundo Martínez de defensa central y corriendo el riesgo de ser goleado. Pero eso no pasó. Así, el ‘Trencito Azul’, demostró que le resultó difícil mantener la velocidad con la que empezó la etapa.
La misión de Célico será mantener las ganas de su equipo de seguir peleando. Su próximo rival será Emelec, en Quito.
En cambio, la ‘AKD’ está enrumbada a pelear el Campeonato con el empuje de esa hinchada que no abandona aunque el fantasma de las deudas se pasea por Carcelén y siempre anda asustando al equipo.
La nueva contratación
- Según la dirigencia, el volante David Quiroz ya deberá sumarse a los entrenamientos del Quito porque todo está arreglado con el empresario. Es el último refuerzo chulla.
- El próximo partido del Quito será ante el Deportivo Cuenca, en el estadio Alejandro Serrano Aguilar. En la FEF se deberá confirmar si se juega el viernes, a las 20:00.