La venta de accesorios y de entradas fue poca en Manta, este 15 de diciembre del 2015. Foto: Patricio Ramos / EL COMERCIO
Las expectativas del primer partido entre Emelec y Liga Deportiva Universitaria por la definición de quien será el campeón del fútbol nacional son diferentes en Manta y en Portoviejo.
El partido se jugará este miércoles a las 19:30 en el estadio Reales Tamarindos en Portoviejo. En el puerto manabita, por ejemplo la venta de entradas era baja hoy 15 de diciembre.
Fabián Mero, comerciante de ropa se arriesgó y compró algunas entradas para tratar de revenderlas, pero le fue mal.
La gente no compra, como el partido es en Portoviejo muchos prefieren reunirse entre amigos y contratar la señal por un canal de televisión pagada y mirarlo en sus casas, afirma Mero. Las tribunas que compró Mero en USD 50 apenas las vendía en USD 52, no tenía margen de ganancia. Mero invirtió USD 1 000 pero cree que apenas si recuperará el capital, el miércoles se va a tratar de venderlas en Portoviejo.
La venta de accesorios es nula en Manta, no hay puestos donde se ofrezcan gorras, camisetas y banderas. En Portoviejo durante las primeras horas del 15 de diciembre pocos aficionados llegaron hasta las boleterías del estadio Reales Tamarindos para comprar una entrada.
En la Avenida Universitaria en apenas tres puestos de venta de accesorios se ofrecían recuerdos deportivos más de Emelec que de Liga. La primera final entre Emelec y Liga genera expectativas positivas por ejemplo en los empresarios hoteleros. Celia Higuera, presidenta de la Cámara de Turismo de Manta afirma que cuando juega Emelec y es por la noche la ocupación de los hoteles de tres, cuatro y cinco estrellas aumenta por una noche en un 25 % sobre lo normal. Cuando juega en el día nadie se hospeda, se van el mismo día, afirma.
Entre los hoteles de alta gama de Manta donde se aloja la mayor parte de los hinchas de clase media hay 700 plazas, afirma Higuera. Los hinchas de las barras del equipo azul por lo general llegan con una o dos horas de anticipación al partido, muchos incluso arriban con su sanduche, termina el partido y se regresan pues Guayaquil está apenas a tres horas y media de Manta afirma Higuera.