El partido Aucas vs. Universidad Católica tuvo 22 vallas alrededor de la cancha del estadio Olímpico Atahualpa. Foto: Julio Estrella/ EL COMERCIO
El descenso del Deportivo Quito a la Segunda categoría generó una pugna legal por el manejo de la publicidad interna en el estadio Olímpico Atahualpa. La exclusividad de este beneficio económico para el Quito está en debate.
El Quito se favorece de la ‘concesión’ hecha por el Municipio desde 1966, según consta en el convenio firmado entre Concentración Deportiva de Pichincha (CDP), propietaria del escenario, y el Cabildo. Este ingreso económico fijo y de cada año de la ‘AKD’, sumergida ahora en una profunda crisis, está en observación.
La directiva azulgrana, presidida por Eduardo Romero, anunció que no respetará los contratos firmados y adjudicados en las dos administraciones anteriores para el manejo publicitario.
“La actual dirigencia rechaza y desconoce los contratos que sobre el tema han suscrito las presidencias de turno por ser totalmente desastrosos (económicamente) para la institución”, se anunció en un documento firmado por Romero.
Hay contratos hechos por dos presidentes distintos con dos empresas distintas. El primero fue pactado en la administración de la cooperativa Pastocalle, el 22 de enero de este año. Allí se resolvió entregar el manejo de la publicidad, por siete años, a la empresa Ledvisión. El acuerdo era que los ingresos generados se dividirían a medias entre el club y la empresa. Pero no prosperó.
Con la llegada de Freddy Mayorga a la presidencia, el contrato entró a revisión. “Esta empresa de Guayaquil no vendió nada. Nos reunimos y reconocieron que no había empresas interesadas en pautar. En cuatro meses no entregaron dinero y necesitábamos recursos”, explica Mayorga.
Entonces, en abril, la administración del club adjudicó a otra empresa el manejo de la comercialización de las vallas. Allí entró Patricio Salazar, con Enfoque publicidad.
Según la página de la Superintendencia de Compañías, esta firma fue constituida en 1992. La empresa ha sido proveedora de vallas en el país para los torneos como Copas Libertadores y Sudamericana. Ahora, desde este año, tiene la comercialización directa de vallas para los partidos de fútbol del campeonato local que se juegan en el Olímpico.
¿Cómo fue esta segunda adjudicación? “El Quito me invitó a participar y llegué a un acuerdo comercial. Hasta la presente fecha he entregado USD 171 000. En cuatro meses he dado ese dinero para distintos pagos que se han realizado. Para levantar suspensiones, para pagar a jugadores y otros gastos“, contesta Salazar.
Esa disposición administrativa que beneficia al Quito es criticada por los otros clubes de Pichincha, los cuales no reciben ningún dólar, pese a organizar las programaciones. Estos son
El Nacional y Universidad Católica. “Nosotros no tenemos ningún beneficio por esa publicidad. En la Asociación de Fútbol de Pichincha (AFNA) se habló del tema porque la
Federación Ecuatoriana tampoco ha pagado los valores pendientes”, dijo Luis Rojas, gerente financiero de
El Nacional.
U. Católica y los militares están en desacuerdo porque no pueden usar esos espacios en sus partidos y que el beneficiario sea el Quito. Independiente del Valle, que fue local en la última edición de la Copa Libertadores, también se negó a pagar los valores por el uso del estadio.”El club donó las taquillas para los damnificados y el reclamo no cabe”, dice el gerente,
Santiago Morales.
Así, en los partidos que la Católica y El Nacional juegan en el Atahualpa se pueden contar 22 vallas alrededor de la cancha. Pautar publicidad en esos espacios cuesta entre
USD 8 000 y 12 000. Hay descuentos para los auspiciantes que ponen dos o tres vallas.
Salazar, quien ha sido parte de los directorios del club en los últimos años, comenzó a comercializar las vallas que se pueden ver al filo de la cancha. La directiva cuestiona que el Quito reciba USD 200 000 por año. Salazar, en cambio, aclara que las cláusulas determinan que Enfoque tendrá que pagar ese valor, pero por cada año. Admitió que el plazo del acuerdo son
24 meses.
La directiva insiste en el reclamo de dineros pendientes por parte de la Ecuafútbol por las eliminatorias. Según Álex de la Torre, por cada partido de la Tri se daba USD 80 000 al Quito por concepto de publicidad. Esto se hacía sin ninguna norma técnica.
Por lo pronto al parecer se avizora una pugna legal por el manejo de la publicidad, mientras el área jurídica del Municipio aún analiza el convenio que beneficia al
Deportivo Quito.