Daniel Angulo celebra el primer gol anotado ante el Barcelona SC. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Daniel Angulo evita en estos días el contacto con los periodistas, quienes lo buscan porque es el delantero estrella del Independiente del Valle, el equipo de moda en el Campeonato Nacional. Notablemente molesto se justifica: “Cuando esos manes dejen de hablar mal de mí, ahí conversaremos”.
El atacante, de 28 años, se refiere a los “periodistas de radio y locutores de la televisión” que dicen que “finge mucho las faltas” y que supuestamente no lo tratan con respeto. Por eso es que decidió aislarse.
Su fama creció más al final de la temporada pasada, cuando en el último partido contra Barcelona Sporting Club en el estadio Rumiñahui, el 1 de noviembre, el ariete, de forma iracunda, afirmó que los jugadores canarios eran “brutos”.
Esta expresión generó que los hinchas canarios descargaran su ira y burla contra él, a través de las redes sociales. Además, fue el tema principal de conversación en los medios de comunicación.
Por ello, desde el inicio del año, Angulo prefiere no dialogar con los periodistas que lo buscan en el complejo del club, en Sangolquí.
Apenas se detiene para conversar con aquellos a quienes tiene más confianza, pero sus palabras son breves. El pasado lunes 6 de abril y este jueves 9, el atacante abandonó el complejo sin emitir una sola palabra, a pesar de que es uno de los goleadores del torneo, con seis tantos.
Con su aporte, Independiente se afianzó en la punta de la tabla de posiciones, tras vencer 3-1 a Emelec, el actual bicampeón ecuatoriano. El atacante esmeraldeño marcó dos goles y fue peligroso en todo el cotejo.