Ruben Israel, entrenador del Barcelona SC. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
Un grupo de 20 aficionados visitó la práctica del Barcelona Sporting Club el pasado miércoles 4 de marzo para reclamarle a Rubén Israel, estratega del equipo, por los resultados obtenidos en los últimos tres meses.
Durante ese tiempo, los amarillos han jugado cuatro partidos del Campeonato nacional y suman cinco puntos. En la Copa Libertadores registran dos derrotas consecutivas y están en el último puesto de su grupo.
Aunque el estratega charrúa conversó con los enfadados aficionados, la paciencia de este sector parecería estar llegando a su límite. En las redes sociales el malestar se mantiene y etiquetas como #FueraIsrael comienzan a tomar fuerza.
La directiva del club ha mostrado su apoyo al técnico uruguayo en repetidas ocasiones. El miércoles los principales canarios se reunieron con el DT en un restaurante de Samborondón y ayer organizaron un almuerzo de confraternidad en el estadio Monumental.
Pese a esas manifestaciones de respaldo, lo cierto es que la directiva canaria tiene antecedentes de no tolerar malos resultados. Gustavo Costas y Carlos Ischia, no terminaron sus contratos con el club, debido a las derrotas que cosecharon en sus periodos.
En el 2012 Luis Zubeldía tampoco terminó su vínculo con el club, debido a una discusión con el presidente, Antonio Noboa, luego de empatar en el estadio Monumental ante Liga de Quito, en abril de ese año. Otro estratega que pasó por el club durante la administración de Noboa fue Gustavo Soler.
Por estos días, los representantes del equipo han preferido el silencio. Los directivos no quieren expresarse de la crisis de resultados que atraviesa el club. Israel también dispuso que los jugadores entrenen a puerta cerrada, para evitar contacto con los periodistas y aficionados.