Jonatan Alvez (izq.) jugador del Barcelona Sporting Club, recibe una cartulina roja en el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores de 2017 contra el Santos, jugado en el estadio Vila Belmiro, en Santos, Brasil, el 20 de septiembre de 2017. AFP
Barcelona Sporting Club cerró este lunes 23 de octubre de 2017 sus puertas al contacto con los periodistas y aficionados hasta el próximo miércoles, cuando recibirá en su estadio al Gremio brasileño para el partido de ida de las semifinales de la Copa Libertadores.
Tras el partido de ayer (domingo ante El Nacional en Quito) por el campeonato ecuatoriano, que empató 3-3 en cancha de El Nacional con una plantilla en su mayoría suplentes, el equipo principal se concentró para volver a entrenarse en dos grupos, pero a puertas cerradas.
Sin opción para ganar el título local de este año, el campeón del año pasado centra toda atención ahora en la Copa Libertadores con los resultados que lo tienen entre los cuatro mejores del torneo.
Barcelona Sporting Club figura como noveno en la tabla de posiciones de la segunda etapa local con 13 puntos, 15 menos que el líder, Emelec, que cuenta con 28.
Todas las figuras del equipo ponen su atención únicamente en ganarle a Gremio, pese a que no integre la plantilla su máximo anotador, el uruguayo Jonathan Álvez, por la suspensión de un partido en el torneo continental.
En su lugar, se presume que saltará al terreno de juego el argentino Ariel Nahuelpan, mientras que Oswaldo Minda podría reemplazar al también suspendido por tres partidos, el brasileño naturalizado ecuatoriano Gabriel Marques.
El conjunto torero arrancó la disputa de la actual Libertadores en un grupo que integraban el actual campeón, el colombiano Atlético Nacional, el Estudiantes de La Plata argentino, además del Botafogo, con el que se clasificó a octavos de final.
Eliminó al Palmeiras, de Brasil en octavos, y al también brasileño Santos, por cuartos de final.