La Feria de Badajoz terminó siendo una luz brillante en medio de una temporada opaca por la crisis económica que envuelve a España.
La gran imaginación de los empresarios de la plaza extremeña, el variado juego del ganado y la variada y alta tesitura artística de los diestros terminaron brindando una gran feria correspondida con la masiva asistencia de los espectadores a los tendidos de la plaza de Badajoz.
La encerrona del variado y valiente Antonio Ferrera con seis toros del acreditado ganadero Victorino Martín le valieron un triunfo sonoro con cuatro orejas y puerta grande en la cúspide de su carrera torera.
La última corrida fue de triunfo para Alejandro Talavante, inspirado en esta temporada y un José Mari Manzanares que ratifica cada tarde su condición de gran figura del toreo quienes se repartieron cinco orejas ante toros de Zalduendo.
Pero el día de mayor expectación fue el lunes. Los toros de Garcigrande correspondieron al llenazo en los tendidos y un Juan José Padilla con una oreja en la mano, un José Tomás con tres orejas y un Julián López ‘El Juli’ en un momento de toreo superior que cortó cuatro orejas y estuvo sensacional, pusieron la fiesta brava en todo lo alto.
El Juli venía de una lesión en Granada y se prepara para su paso por la Feria del Toro de Pamplona en julio.
José Tomás solo se anunció en esta temporada para actuar en Badajoz, en Huelva y en la plaza francesa de Nimes.
En la corrida de rejones, a hombros con dos trofeos Hermoso de Mendoza, le ganó la partida a Ventura, que cortó uno y perdió dos más por matar mal y la negativa del palco. Mota Caetano, a buen nivel, sumó oreja.