Un entretenido festival taurino se realizó el sábado en la Finca Yaruquí, organizado por la Fundación Sierraflor.
Tras la exhibición del Centro Ecuestre Cerro Viejo el novillero José Alfredo cumplió una muy torera actuación, con temple y calidad, redondeó faena con pases de todas las marcas y remates pintureros ante una brava becerra de La Viña que acudió a la cabalgadura desde los medios en tres ocasiones.
En el capítulo de los aficionados prácticos Cristóbal Roldán compuso una armónica actuación con temple y gusto. Lo propio ocurrió con Juan Sebastián Roldán. Rodrigo Patiño, hijo, mostró, una vez más, su experiencia y rodaje ante el único novillo. Con entrega alcanzaron algunos pasajes lúcidos Esteban Morales y Mario José Solano, ante vaquillas de La Viña. Cerró el festejo el rejoneador Enrique Cobo con una vaca de Santa Coloma. Dio cuenta de su experiencia y buena doma.