Técnicos de la escudería de Ferrari trabajando durante la competencia del Gran Premio de Hungría. Foto:AFP
Tras una decepcionante primera mitad del año en la Fórmula 1, Ferrari anunció este miércoles, 27 de julio del 2016, la salida del equipo de su director técnico, el británico James Allison. La decisión se tomó “de común acuerdo”, según el comunicado difundido por la ‘Scuderia’ antes del Gran Premio de Alemania de este fin de semana.
Mattia Binotto asumirá el puesto vacante en busca de un nuevo empuje para el equipo del alemán Sebastian Vettel, que no ha conseguido ninguna victoria en lo que va de 2016. El contrato de Allison estaba vigente hasta finales de 2017, pero su posible despido tras tres años en Maranello era un rumor que corría desde hacía tiempo en el “paddock” y que Ferrari había negado vehementemente en varias ocasiones.
Ante las crecientes críticas al paquete aerodinámico del bólido, algo que estaba bajo su responsabilidad, Allison se alejó últimamente de la dirección de Ferrari, al frente de la cual está el cada vez más impaciente Sergio Marchionne. Además, tras la repentina muerte de su mujer hace unos meses, Allison deseaba al parecer pasar más tiempo en su casa con sus hijos que en la fábrica del equipo en Italia.
El jefe del equipo, Maurizio Arrivabene, que también está bajo presión, sólo fue citado con una frase en el breve comunicado distribuido hoy. “El equipo querría agradecer a James su compromiso y sacrificio durante el tiempo pasado juntos y le desea éxito y serenidad en sus futuros proyectos”, dijo. Allison agradeció también a sus compañeros por “la experiencia profesional y humana” que compartieron y les deseó “un futuro feliz con muchos éxitos”.
Actualmente, Ferrari sigue por detrás de Mercedes en el campeonato mundial y, además, sufre el acuso de un reforzado equipo Red Bull. Ni Vettel, tetracampeón mundial, ni su compañero Kimi Räikkönen lograron una victoria en las primeras 11 carreras de la temporada.
El rendimiento del motor de Ferrari parece haberse acercado claramente al de Mercedes, pero lo que está fallando ahora es la aerodinámica, problema que condujo a la salida de Allison del equipo.