La Cholita Tarqueña, Nelly Inga, entrega el trofeo al capitán del equipo vicecampeón de la temporada 2015. Foto: Facebook Liga Parroquial
Los habitantes de 24 comunidades de la parroquia Tarqui, en el sur de Cuenca, están a la espera de la reanudación del Interclubes de fútbol. El campeonato se suspendió, a finales de marzo, debido a las constantes lluvias que se registran en la capital azuaya.
La organización está a cargo de la Liga Deportiva Parroquial de Tarqui. La decisión de aplazar los partidos se tomó en coordinación con la Junta Parroquial. El objetivo de los directivos fue dar mantenimiento y preservar el campo de juego del estadio de la localidad.
El torneo reúne a 40 equipos de diferentes comunidades como Acchayacu, Atucloma, Bellavista, Chaullayacu, Cotopamba, Chilcachapar, Gullanzhapa, Manzanapamba, Parcoloma, Morascalle, Chilca Totora, entre otras. Cada representativo cuenta con barra propia y, cada fin de semana, se vive una verdadera fiesta deportiva.
En varones hay 28 equipos, distribuidos en cuatro series de siete conjuntos cada uno. En damas intervienen 12, repartidos en dos grupos de seis equipos. De acuerdo con el reglamento, cada club puede inscribir hasta dos jugadores que no pertenezcan a Tarqui, pero que no sean profesionales.
Según Gerardo Mora, presidente de la Liga Deportiva Parroquial de Tarqui, entre los cuadros tradicionales están Tarqui, como más de 60 años de fundación. Se suman Chacarita Júniors, Juventud, Aliens y Estrella Roja. Los cinco clubes son reconocidos jurídicamente. Hay otros que están en trámite.
Lo llamativo del campeonato son los denominados ‘clásicos’, en donde se enfrentan representativos de las mismas comunidades. Por ejemplo, existe rivalidad deportiva entre Tarqui y Aliens, Chacarita con Graficon. En estos dos últimos equipos hay hermanos, primos y familiares que son adversarios en la cancha.
Mora insiste en la rigidez del reglamento. “El jugador debe pertenecer a la parroquia o ser descendientes, hasta nietos, de personas nacidas en Tarqui”. De esa manera se da prioridad a los pobladores de los diferentes caseríos y se promueve un campeonato más competitivo.
La Liga Deportiva Parroquial de Tarqui es una de las pocas reconocidas por el Ministerio del Deporte y por ello recibe un presupuesto anual de USD 4 300. Ese dinero sirve para organizar el Campeonato Interclubes, el Intercomunitario, y otras competencias locales. Durante todo el año existe actividad deportiva.
La Cholita Tarqueña participa activamente en este campeonato comunitario, en las ceremonias de inauguración y clausura. El año pasado, por ejemplo, Nelly Inga fue la encargada de premiar a los equipos campeón y vicecampeón. También entregó el trofeo a Manuel Pugo, goleador del certamen con 13 tantos.
El campeonato se suspendió en la cuarta fecha y se reiniciará el próximo 7 de mayo, según el informe de Mora. Todos los sábados se juega de 14:30 a 23:00, puesto que el estadio tiene buena iluminación; mientras los domingos la programación se inicia a las 09:00 y termina pasadas las 19:00.
Las barras de cada una de las comunidades pone el colorido en los graderíos del estadio parroquial Tarqui. El apoyo no se hace esperar con bombos, platillos, pitos, banderas y el bullicio de los asistentes. El torneo deberá finalizar la primera semana de julio y hay preocupación porque el torneo está suspendido más de un mes.
El campo de juego tiene la protección respectiva para evitar cualquier contratiempo entre aficionados y futbolistas. Sin embargo, salvo los reclamos a los árbitros, no se han registrado contratiempos, sostiene Lizardo Zhagui, uno de los habitantes de Tarqui.
Los jugadores destacan que el torneo permite estar más cerca de los familiares y amigos, y lejos de los vicios.