Marco Rodríguez en el momento de su detención en el estadio Hernando Siles de La Paz. Foto: Twitter
La derrota 3-2 sufrida por Bolivia en manos de Ecuador no fue el único golpe bajo que sufrió la Federación Boliviana de Fútbol. Estuvo acompañada de un escándalo político en el estadio Hernando Siles de La Paz. Marco Rodríguez, su presidente, fue arrestado por pedido de la Fiscalía en medio del partido.
La Fiscalía intentó detenerlo dos veces. La primera fue en el hotel de concentración de los jugadores. la segunda fue en el estadio, después de que las autoridades fueran avisadas de su presencia durante el cotejo de las eliminatorias rumbo al Mundial de Catar 2022.
Diarios de ese país informaron que la aprehensión se produjo sin resistencia por parte de Rodríguez, quien fue trasladado rumbo a Santa Cruz por desobedecer un amparo constitucional, que reconoce a Robert Blanco, como titular de la FBF.
“El 23 de julio el comité ejecutivo designó al vicepresidente Rodríguez para suceder Salinas, pero Robert Blanco, el otro vicepresidente, acudió a la corte constitucional de la región de Santa Cruz (este) para pedir el puesto. Tras un fallo favorable de la corte, éste acudió a las oficinas principales de la FBF, en la ciudad de Cochabamba, para asumir funciones”, recoge Infobae.