La marchista Paola Pérez se entrenó en el sector de Racar, en Cuenca.
El nadador Esteban Enderica acudió a la piscina que es propiedad de la familia, en Cuenca. Cortesías: Paola Pérez y Esteban Enderica
Ecuador tiene 181 seleccionados en el Plan de Alto Rendimiento (PAR). Ellos reciben asignaciones mensuales del Estado, cuyas categorías van de acuerdo con sus éxitos. De ese número, 121 están en cuatro provincias: Pichincha, Guayas, Azuay e Imbabura.
La pandemia los obligó a reformular su calendario de entrenamientos y competencias. Pese a que el país entró en una fase de desconfinamiento, la mayoría de deportistas aún sigue entrenándose en
sus viviendas.
¿La razón? Los atletas consideran que aún no cuentan con todas las normas sanitarias y los protocolos de bioseguridad. Los primeros en salir a los parques lineales, montañas y mares fueron marchistas, patinadores, triatletas y canoístas. De esa nómina de atletas que reciben incentivos económicos, 42 son de Carchi, Los Ríos, Esmeraldas, Manabí, Tungurahua, Sucumbíos y El Oro. Los 18 restantes representan a otras 11 provincias. En este listado no constan los 142 deportistas del PAR que reciben dinero únicamente para sus competencias en el exterior.
El confinamiento por la propagación del covid-19 les ha servido para estar cerca de su familia. En los últimos tres meses, la mayoría ha permanecido en sus ciudades de origen, con prácticas virtuales y compartiendo con sus allegados.
Según Lenin Preciado, uno de los judocas de élite del país, en ninguna otra ocasión dejó de entrenarse tanto tiempo al 100%. A su criterio, la mayoría se ha preparado entre el 40% y 50% de lo que habitualmente realiza. “La cuarentena sirvió para meditar y también nos permitió descubrir nuevas habilidades, como cocinar”.
Los seleccionados están ansiosos por volver a sus escenarios, pero están conscientes que deben priorizar la salud. Se sienten tranquilos porque las autoridades de la Secretaría del Deporte les han asegurado que el proyecto de Apoyo al Deporte de Alto Rendimiento se mantiene intacto.
El PAR cuenta, en la actualidad, con nueve deportistas en la máxima categoría: Tokio 2021, cuya asignación mensual para cada uno es de USD 3 000. Allí están los esmeraldeños Álex Quiñónez (atleta), Andrés Montaño (luchador) y Alexandra Escobar (pesista). Ellos se preparan en Quito, Portoviejo y Guayaquil, respectivamente; además realizan concentraciones permanentes fuera del país.
En ese mismo grupo están Glenda Morejón (Imbabura), Julio Castillo (Napo), Neisi Dajomes (Pastaza) y Tamara Salazar (Carchi). En ese orden, la marchista y el pugilista tienen su base en Cuenca; las pesistas, en cambio, se alistan con frecuencia en Guayaquil. Por ahora, Castillo sigue en la capital azuaya; el resto se entrena en sus respectivas ciudades.
Morejón adquirió una caminadora, una bicicleta estática y otros accesorios para prepararse cerca de su familia en Ibarra. Ella y su técnico, el marchista Andrés Chocho, coincidieron en que con sus seres queridos sería menos complicado el aislamiento social. Regresará a Cuenca cuando la situación así lo amerite.
En la máxima categoría también están los azuayos Esteban Enderica (nadador) y Alfredo Campo (bicicrosista).
El primero se alista con regularidad de Cuenca; mientras el segundo lo hace en Carolina del Norte, Estados Unidos, incluso no se movió de allí durante el confinamiento.
Los ciclistas Richard Carapaz y Jhonatan Narváez, quienes están en las categorías Élite y Desarrollo, se entrenan con el equipo británico Ineos, pero por la pandemia permanecen en Ecuador.
La escaladora Andrea Rojas, que reside en Italia desde hace cuatro años, también continúa con sus entrenamientos.Como ella, otros ecuatorianos se preparan fuera del país. Allí están la nadadora Samantha Arévalo y el microtenista Alberto Miño, quienes residen en Francia y Alemania. Igual el patinador Jorge Bolaños, quien hace sus prácticas deportivas desde hace 13 años en Colombia.