Byron Piedra (gorra blanca), en su penúltimo entrenamiento en Cuenca. Lo dirige Rafael Martínez (izq.). Foto: Manuel Quizhpe/EL COMERCIO
Lo mejor de Byron Piedra está por venir. Es la advertencia que hace el mexicano Rafael Martínez, quien lo dirige desde hace tres años. El atleta ecuatoriano de 34 años también está convencido que experimenta un momento especial en su carrera.
El corredor azuayo evita pronunciarse sobre la posibilidad de clasificar a sus quintos Juegos Olímpicos. Estuvo en Atenas 2004, Pekín 2008, Londres 2012 y Río de Janeiro 2016. “No quiero dar proyecciones ni presionarme, pero este año saldré a correr de igual a igual con los mejores del mundo”.
Pulverizar las marcas de sus antecesores: Rolando Vera y Silvio Guerra, en las pruebas de media maratón y maratón, es el desafío planteado para este 2017. Su primer intento en la distancia de 21 kilómetros será este domingo, desde las 07:00, en Houston, Estados Unidos.
Vera, en 1994, registró una hora, un minuto y 36 segundos (1:01:36) en el Mundial de Media Maratón que se corrió en Oslo, Noruega. Guerra, en cambio, cronometró 02:09:49 en la Maratón de Chicago, Estados Unidos, realizada en 1999. Los mejores tiempos de Piedra son de 1:02:35 y 2:14:12.
El múltiple campeón sudamericano en pruebas de semifondo debía viajar anoche a Houston, desde Guayaquil con escala en Quito. En su penúltimo entrenamiento, cumplido en la pista sintética Jefferson Pérez, se mostró ilusionado. “La media maratón de Houston es de gran importancia porque correrán los mejores maratonistas del planeta”.
Su afirmación se basa en la presencia del etíope Feyisa Lilesa y del norteamericano Galen Rupp, medallistas de plata y bronce en los Juegos Olímpicos del año pasado en Brasil. Lilesa tiene el récord de la prueba (59 minutos y 22 segundos), impuesta el 2012. También, ganó en el 2013 y 2016.
La competencia de este domingo le servirá para seguir fogueándose con la élite mundial. La meta es mejorar su marca personal y superar los registros de Vera y Guerra. Después de Houston, su reto será prepararse para la Maratón de Lake Biwa en Japón, previsto para el 5 de marzo.
Martínez insiste que Piedra experimenta un gran momento y “está madurando como los buenos vinos”. Por ello, no duda que su dirigido tiene la capacidad para clasificar a sus quintos Juegos Olímpicos. Él se adaptó a los cambios de pasar de las pruebas de semifondo a distancias de largo aliento.
Para sus participaciones en las pruebas de 5 000 y 10 000 metros, su promedio de entrenamientos era entre 140 y 160 kilómetros semanales. Ahora trabaja de 220 a 230 km por semana. “Su mentalidad es más fuerte y aguerrida porque se trata de competencias extenuantes”. Ganó personalidad.
El atleta refuerza el criterio del adiestrador al reconocer que su cuerpo se adaptó a las distancias largas, entrenando a diario con profesionalismo. “Me siento mejor y estoy preparado para correr rápido”.
Él está conforme con el puesto 18 que alcanzó el año pasado en los Juegos Olímpicos de Brasil, pero se puede mejorar. Su aspiración en la Media Maratón de Houston es correr por debajo de una hora y dos minutos, aunque hay atletas que pretenden cubrir el recorrido por debajo de una hora.
Será su cuarta competencia de este tipo en su trayectoria, que empezó a probarse en el 2013. Entre otros retos de este año están el Mundial de Atletismo en Londres y los Juegos Bolivarianos en Santa Martha, Colombia.