Los jugadores de la selección de Alemania levantando la copa del Mundial de Brasil 2014. Foto: Archivo/EL COMERCIO
Con la sombra de la corrupción todavía acechando, la FIFA se reunirá esta semana en la capital bahreiní de Manama con el Mundial de fútbol XXL de 2026 como tema central en la agenda.
El principal proyecto del nuevo presidente del ente rector, Gianni Infantino, conocerá mañana, 9 de mayo del 2017, durante la reunión del Consejo cómo se repartirán los cupos entre las confederaciones continentales.
Y dos días más tarde se celebrará también en la capital de Bahréin el Congreso Anual de la FIFA, con el debate sobre la sede del Mundial 2026 y las continuas violaciones al código ético en medio de la escena.
Richard Lai, el presidente de la Asociación de Fútbol de Guam, una minúscula isla del Pacífico, se declaró culpable recientemente en Estados Unidos de varios cargos de corrupción y el jeque kuwaití Ahmad Al-Fahad Al-Sabah renunció al Consejo de la FIFA al verse implicado en ese mismo caso.
Pero la FIFA hace tiempo que se acostumbró a los escándalos y las reuniones de esta semana se llevarán a cabo sin mayores trastornos. La luz verde a la nueva distribución de las plazas para el Mundial de 2026, que aumentará de 32 a 48 el número de participantes, parece únicamente un trámite.
La FIFA ya anunció a finales de marzo una propuesta que será confirmada mañana. De acuerdo al nuevo reparto, Europa tendrá 16 cupos (por los 13 que cuenta ahora), mientras que África será el principal ganador: saltará de cinco a nueve plazas. Además, la Conmebol subirá de 4,5 a seis; la Concacaf tendrá también seis cuando hasta ahora recibía 3,5: Asia tenía 4,5 y ahora contará con ocho; y Oceanía tendrá una plaza asegurada.
El anfitrión recibirá una de las plazas asignadas a su confederación. En caso de que haya más de un anfitrión, el Consejo decidirá la manera de clasificación. A esos 46 billetes directos hay que sumar otros dos que se repartirán en un torneo previo que se jugará en la misma sede del Mundial y en el que no podrá haber selecciones europeas.
Será la primera vez que haya un “play-off” antes del Mundial. “Este torneo podría sustituir a la Copa Confederaciones y podría servir de ensayo para el Mundial”, dijo a dpa el presidente de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Reinhard Grindel.
“Pero aún hay que decidir en qué momento se puede disputar ese ‘play-off'”. El Mundial 2026, el primero en formato XXL, no tiene aún una sede, pero la única candidatura que se presentó hasta el momento fue la de Estados Unidos, Canadá y México. El trío norteamericano quiere acelerar además el proceso.