Brahian Alemán no dejó de discutir con los jugadores albos durante el partido en Casa Blanca. Fotos: EL COMERCIO
El mediocampista uruguayo de Barcelona Sporting Club, Brahian Alemán, estuvo muy activo durante el partido. Sin ser el conductor de juego de otros partidos, aprovechó que el árbitro Omar Ponce detuvo el juego en varias ocasiones para mostrar su faceta oculta en Casa Blanca: su ‘boquilleo’.
El charrúa se metió en el partido, pero no como le pidió el DT Rubén Israel. Sacó sus ‘garras’ y su boca para calentar a los jugadores rivales. Empezó con Alexander Domínguez, continuó con Norberto Araujo y no se aguantó las ganas de encarar a José Madrid.
Alemán no se contuvo y para evitar que las cámaras captaran el movimiento de sus labios, se tapó la boca con la mano derecha y recriminó a ‘Dida’, quien evitó que el uruguayo anote a favor de los toreros.
El mediocampista perdió la cabeza cuando expulsaron a Pedro Pablo Velasco. Israel tuvo que meterse a la cancha para detenerlo. Al final, el DT evitó que sea sancionado y Alemán terminó limpio, sin tarjetas en este encuentro.
El mediocampista jugó los 94 minutos. En ese tiempo consiguió seis remates al arco, que salieron desviados, hizo una recuperación, logró 13 pases correctos y cobró un tiro de esquina. Su juego pasó desapercibido por los hinchas toreros, pero su boquilleo fue protagonista.