Control para los agentes

Ellos se codean con los millonarios dueños de los clubes... Esos son los agentes de futbolistas o empresarios, hoy en día. Su influencia puede lograr que se transfiera en un mismo día a un jugador. Pero ellos se aprovechan, usualmente, del desconocimiento de los deportistas.

Les venden maravillas y les plantean escenarios, ficticios normalmente.

Esas son las características de los afamados empresarios que han ganado notoriedad ya sea por traspasar a los jugadores a prestigiosos clubes o por bulliciosas irregularidades.

Es necesario que la FIFA sea más minuciosa y exigente ante estas personas que se aprovechan de los futbolistas. Y solo buscan el lucro personal para ellos por recibir los porcentajes de las transferencias.

Basta hurgar en cuánto fue transferido el delantero ecuatoriano Christian Benítez (USD 15,4 millones)  y cuál fue el porcentaje que dieron a la persona que lo representó. Los agentes usualmente se llevan el 10 % por una venta o compra. A eso se agrega otro porcentaje por un salario anual o cómo lo haya convenido con su representado. Además, hay agentes a los cuales los futbolistas hasta piden ­asesoría para que les administren sus bienes.

En el tema de Benítez, la Federación Ecuatoriana de Fútbol tiene que comprometerse con la familia para  darle  el soporte legal y administrativo en Qatar y que su último club cumpla con el contrato y la póliza del seguro para un futbolista de alto rendimiento.

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