Quito se puso los colores de la Tricolor
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Quito, ciudad de carreras atléticas, vivió su gran día. La capital ecuatoriana despertó con millares de corredores presurosos, felices y emocionados por salir desde la línea de partida de la Quito Últimas Noticias 15K.
En unidades del trolebús, autos, buses o simplemente caminando, los atletas llegaron al sur de la capital para competir en la carrera más grande del país. 19 000 atletas (en las distintas categorías) participaron en la edición 54.
Los competidores se ordenaron por los colores amarillos, azul y rojo. Así formaron una bandera simbólica de Ecuador, en honor a la Tricolor, que hoy parte a Brasil para intervenir en el Mundial de Fútbol.
Con gritos de aliento, cánticos y aplausos, los aficionados salieron del sur de la capital. A su paso por las calles, recibieron más muestras de apoyo de las personas que, emocionadas, y en pleno sol observaron su paso por las calles de Quito.
“Vamos Byron, vamos. No desmayes”, se le escuchó decir a una aficionada durante el paso de Byron Piedra por el centro de la capital.
El ecuatoriano perdió la opción de alcanzar al líder, pero igual recibió el aliento de las personas.
Para los atletas no importó el sol o la innumerable cantidad de competidores. La intención era llegar a la meta.
Algunos iban con audífonos, otros con cronómetros para registrar sus tiempos. Algunos, incluso, llevaban mascotas por las calles. Pero también hubo atletas que guiaron a personas con discapacidad durante los 15 kilómetros.
Esas fueron muestras de la solidaridad de los competidores y el anhelo de llegar a la meta sin importar el lugar.
A cada paso, los aficionados y los élite recibían agua para hidratarse y los aplausos de sus familiares y conocidos, que se apostaron en diferentes sitios del trayecto.
También hubo imágenes emotivas como las de los atletas con discapacidad, que con muletas luchaban por arribar a la pista sintética del Atahualpa para cumplir su objetivo.
En el interior del estadio también se vivió una fiesta con la llegada de los participantes. A ellos los esperaban sus familiares y conocidos.
Los espectadores del estadio aplaudieron a los atletas que cumplieron sus anhelos de llegar a la línea final de la carrera.