Un arco de agua recibió al avión en el que llegó Richard Carapaz al Ecuador, la noche del 10 de noviembre del 2020. Foto: Patricio Terán/ EL COMERCIO
Antonio Carapaz llegó con anticipación al aeropuerto Mariscal Sucre de Quito para recibir a su hijo Richard, quien fue vicecampeón de La Vuelta a España. Estuvo acompañado de seis integrantes de su club de Alto Rendimiento Richard Carapaz.
Vestido de verde y bien protegido con su mascarilla, sus ojos expresaban ansiedad. En el 2019 pudo acompañarlo en el anfiteatro de Verona para verlo consagrarse en el Giro de Italia. Esta vez todo lo vio por televisión. El covid-19 lo alejó del lado de su hijo.
Sin embargo hizo el esfuerzo y viajó desde el Carchi para recoger al deportista y a su nuera Tania Rosero, quien fue privilegiada y estuvo en Madrid para la premiación.
“Fue emocionante ver a Richard, pero nos tocó hacerlo por la tele”, dijo su progenitor.
‘La Locomotora de Carchi’ puso en vilo a todo el país en una batalla mano a mano con Primoz Roglic hasta la penúltima etapa. Al final se quedó con el segundo lugar y se consagró como uno de los mejores latinoamericanos, según el escalafón de la UCI.
En los exteriores, además del puñado de amigos y familiares, una caravana de tres patrulleros lo esperaban. Por seguridad, la disposición era acompañar a ‘Richie’ hasta Cayambe y de ahí hacer relevo con otro grupo que lo acompañara hasta su casa.
Carapaz arribó a las 20:58 al aeropuerto Mariscal Sucre y se retiró del mismo por una salida alterna, cercana a la torre de control.
Esta se iluminó con los colores de la Bandera de Ecuador y en la pista, el avión de Iberia fue recibido con un arco de agua, un reconocimiento importante de parte de las autoridades portuarias.
Richard, en sus redes sociales, pidió a la afición que no se aglomere para recibirlo. Por eso tomo la decisión de salir por otro lado y no por la puerta principal de arribos internacionales.