Richard Carapaz, el gregario clave del Movistar Team
Richard Carapaz (centro), como gregario de Nairo Quintana, se puso por delante en la Oro y Paz, en Colombia. Foto: Movistar Team
El rol que hoy asume Richard Carapaz, en la Vuelta a España, no es la de protagonista sino la de gregario. Por eso ayer paró y le entregó su bicicleta a Nairo Quintana, el colombiano que es uno de los dos líderes del Movistar Team y que hoy ocupa el octavo lugar en la clasificación general, tras la séptima etapa.
Hasta antes del inicio de la etapa, el ecuatoriano figuraba en el puesto 21, pero ayer perdió 7 minutos y bajó al puesto 38, a 11 minutos del líder.
“He tenido un pinchazo pero el equipo estuvo muy bien, muy atento. Richard me esperó, me dio su bici y llegamos sin problema junto con Alejandro Valverde (el otro líder del equipo). Ha sido una pena que se escapase la victoria de etapa”, añadió el colombiano.
Valverde está segundo en la clasificación general a 47 segundos del líder. Además, lidera la competencia por puntos y la combinada.
Carapaz es el tercer mejor ciclista del conjunto español, superado solo por sus dos líderes y por encima de sus compañeros Winner Anacona (49), Andrey Amador (73), Nelson Oliveira (77), Imanol Erviti (122) y Danielle Benatti (138), en la clasificación general.
El carchense, de 25 años, hoy no cumple la función de líder como aconteció en el Giro de Italia, cuando ganó una etapa y se ubicó cuarto en la clasificación general. En la Vuelta a Asturias fue el líder: su equipo trabajó para que finalmente logre el primer lugar.
Carapaz hoy es gregario. En el ciclismo se conoce esta asignación a quien debe sacrificar aspiraciones propias y trabajar para sus líderes. Es el escogido, por sus condiciones técnicas y físicas, para romper las estrategias de los otros equipos.
Al ecuatoriano le viene bien ese rol por su fuerza en el ascenso y su temperamento aguerrido. Se le ha visto cuidar a su líder de los jalones y ataques de los rivales; desgastar a los antagonistas, colocarse delante para “romper’ el viento. Es decir, desgastarse físicamente para que brillen el jefe del equipo.
Pero no es la primera vez en el año que cumple con esta labor. En febrero, ya fue gregario de Nairo Quintana, en la Colombia Oro y Paz, que se cumplió en territorio cafetero. El colombiano fue segundo en la clasificación general.
En marzo, todos los halagos de Marc Soler fueron para Carapaz. El español se coronó campeón de la París-Niza, luego de cinco días de carrera, llevado de la mano del ecuatoriano, quien dio muestras de su fuerza en toda la carrera, pero sobre todo, de valentía para encarar los ascensos y el mal tiempo. Cumplió con el ‘voto’ de obediencia para cumplir con la estrategia del equipo.
Richard Carapaz, que corre por segundo año consecutivo la Vuelta a España, no constaba en la nómina inicial. Tomó el puesto que dejó el español Mikel Landa, quien se lesionó en la Clásica de San Sebastián.
El viernes 31 de agosto de 2018, la prensa internacional, calificó a Carapaz como un gregario de lujo y se recordaron varios casos como el del mismo Víctor Hugo Peña, actual comentarista de la cadena ESPN, quien fue líder en el Tour de Francia, pero pedaleaba -con la camiseta amarilla- para Lance Armstrong.
En el Tour de Francia 2012, el británico Chris Froome, pese a ser más fuerte en la montaña, tuvo que trabajar para que su ‘capo’ Wiggins conserve la camiseta amarilla. En ese tour resultó una buena táctica (terminaron 1° y 2° al final), pero una táctica similar resultó mala en la vuelta a España 2011, cuando perdieron la carrera, según recordó el Blog La Ruta del Escarabajo.
Hoy se correrá la octava etapa, entre Puerto Lumbreras y Pozo Alcón, sobre 185 km.
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